El Fortín cayó 3-1 ante Godoy Cruz y acentuó su mal momento tras quedar eliminado de la Copa Libertadores. En tanto, el Tomba sumó tres puntos importantes para acercarse a la Copa Sudamericana.
Está dicho que el fútbol es un estado de ánimo, y hoy Vélez dio otra muestra de ello. Tras la dolorosa eliminación de la Copa Libertadores a manos de Newell´s el último miércoles, el Fortín deambuló por Mendoza y se trajo una dura derrota por 3-1 frente a Godoy Cruz, que aprovechó sus momentos y sumó tres puntos muy importantes.
De entrada, los de Gareca amenazaron con salir a atropellar a su rival, pero el envió duró poco. Enseguida el dominio pasó para el Tomba, que con las trepadas por izquierda de Emanuel Insúa, la conducción de Alexis Castro, la velocidad de Facundo Castillón y la continua amenaza de Mauro Obolo en el área, comenzó a jugar mejor y a llevar peligro al arco del irregular Sebastián Sosa.
El gol que abrió el partido llegó en el epílogo de la primera parte, cuando José Luis Fernández sacó un derechazo que se desvió en Sebastián Domínguez y descolocó a Sosa. Así, Godoy Cruz se fue al descanso envalentonado por la ventaja y pareció seguir igual al inicio del complemento. Una discutible mano de Domínguez en el área fue considera intencional por el árbitro debutante Facundo Tello y Gonzalo Castellani cambió el penal por gol.
No pasaron diez minutos cuando Alexis Castro sacó un fuerte remate desde fuera del área que Sosa nunca pudo controlar. Al arquero se le movió la pelota en el aire y la terminó yendo a buscar adentro por tercera vez en el partido. Quedó tiempo para que Facundo Ferreyra mostrara nuevamente que está de regreso, ya que tras un rebote que dio Ibáñez por un fuerte cabezazo terminó marcando el descuento.
Fue una inapelable victoria por 3-1 para Godoy Cruz, que con estos tres puntos se acerca a San Lorenzo en su lucha por conseguir un pasaje a la Copa Sudamericana y, además, engrosa su promedio pensando en la temporada que viene. Para Vélez, en tanto, significó la séptima derrota del campeonato y la prolongación de un mal momento que ya preocupa en Liniers.
Domingo, 19 de mayo de 2013