Nadal se consagró por octava vez en el Conde de Godó y demuestra que está cada vez mejor. Venció 6-4 y 6-3 a su compatriota Almagro en la final, en una hora y trenta y dos minutos de juego.
Rafael Nadal no parece sentir la inactividad que lo tuvo alejado mucho tiempo de las canchas de tenis. Este domingo derrotó 6-4 y 6-3 a Nicolás Almagro y logró su octavo título en Barcelona, donde no pierde desde el año 2003.
El mallorquín se quedó con la victoria en una final donde la lluvia dijo presente, pero no le impidió vencer a su compatriota con mucha autoridad y pegando en los momentos claves del encuentro.
Con este titulo, Rafa alcanzó el 54° de su carrera y el cuarto de la temporada (ya había ganado San Pablo, Acapulo e Indian Wells), en seis finales consecutivas. Algo impensado después de estar más de siete messe parado por su lesión en su rodilla.
El murciano, que no le pudo ganar nunca a Nadal en diez enfrentamientos, terminó halagando a su rival como lo hacen casi todos. "Es un monstruo que está por encima de los demás en esta superficie", reconoció en la entrega de trofeos.
Domingo, 28 de abril de 2013