La sueca Alexandra Larsson no está en su mejor momento. En pleno éxito y en el auge de la fama, la bella blonda sufrió "miedo escénico" y no pudo realizar la función de "Nada es imposible" el viernes pasado.
"Empezó a llorar y se decidió que no se subiera al escenario", agregaron aunque aclararon que ella "está bien" de salud. En los últimos días, Alexandra pasó por situaciones que le dieron un susto muy grande. Se desmayó y vivió reiterados ataques de pánico.
Este último viernes, la rubia sufrió "miedo escénico" y no pudo hacer la función de la obra. "Alexandra fue para hacer la función del viernes, pero le agarró miedo escénico. Empezó a llorar y los productores decidieron que no se subiera al escenario", comentaron personal del espectáculo. "Por suerte, una de las bailarinas del staff la reemplazó", añadieron.
Esto ya había motivado que sus padres le pidieran que volviera a su país natal para que la vea el médico que la atiende desde que nació. "Fue horrible, el corazón me palpitaba muy rápido. Estaba sola y empecé a temblar mucho. Me volvió a pasar lo del sábado, pero esta vez mucho más fuerte", había dicho.
En aquella oportunidad, en el hospital fue sometida a distintos estudios que le dieron bien: "Me hicieron muchísimos análisis y, por suerte, no había nada grave. De hecho, ya estoy en casa acompañada de tres amigas, que son como mis hermanas, Maite, Gise y Mina. Ni bien se enteraron, me fueron a hacer compañía al sanatorio".
La salud de La Sueca preocupa a su familia, que vive en la pequeña ciudad de Grästorp. "Se inquietaron mucho y mis padres me exigen que vuelva con ellos. Quieren que me vea el médico que me atendió desde que nací. La idea es visitar a mi familia y, de paso, que me vean los médicos de allá", concluyó.
Lunes, 25 de febrero de 2013