Se sobrecargó el curso de agua inundando a varias viviendas sanluiseñas. En la zona rural, decenas de pobladores están con agua en sus casas. Hay autoevacuados. En la villa turística, la lluvia afectó a unas 80 familias y se evidenciaron complicaciones en el escurrimiento por la gran cantidad de construcciones existentes en la zona.
Luego de los 150 milímetros de agua caída entre la noche del viernes y las primeras horas del sábado, en San Luis del Palmar el Riachuelo desbordó dejando bajo agua varias de viviendas. En la zona rural hay decenas de pobladores con sus casas inundadas. También existen vecinos autoevacuados. En Paso de la Patria las autoridades comunales se plantean la necesidad de realizar un nuevo sistema de desagües pluviales. Las precipitaciones afectaron a unas 80 familias, aunque sólo 5 tuvieron que ser evacuadas.
Tal como temían las autoridades municipales de San Luis, por la gran cantidad de agua caída que colmó el Riachuelo, éste desbordó en diferentes lugares haciendo que el agua ingrese a las viviendas y corte calles. Los lugares más afectados están al noreste de la localidad, cerca de la zona conocida como las Palmeras y por supuesto, toda la zona ribereña.
Tras pasar el puente hacia la zona Oeste, son muchos los habitantes afectados, comentó a El Litoral Dalmacio Encinas, quien recorrió el lugar.
Además confirmó que en la área rural y hay muchas casas en el agua y varias personas que se autoevacuaron y se trasladaron con sus familiares.
El agua está a milímetros de vencer la barrera, lo que podría inundar el barrio 100 Viviendas, que se ubica en la entrada del pueblo, cercano al puente.
En tanto, en diálogo con El Litoral, el intendente Oscar García confirmó que “en general, la situación está normalizada en un 100 por ciento. Quedan sí algunos sectores con calles anegadas. Fueron unas 80 casas las afectadas, aunque sólo algunas familias, sobre todo la gente mayor, fueron evacuadas. Los habitantes no quisieron salir de sus viviendas porque sabían que el agua al parar la lluvia se iba a escurrir. Y esto fue así, el escurrimiento se produjo bastante rápido y para las 7 u 8 de la noche, ya se había normalizado la situación”.
Ante el hecho que afectó a distintos sectores de la localidad, García consideró que “esto nos obliga a replantearnos algunas cosas, si bien nunca tuvimos precipitaciones de este tipo, es preciso tomar medidas, sobre todo en lo que sea escurrimiento fluviales urbanos”.
En este sentido, el jefe comunal explicó que “el crecimiento del pueblo de estos últimos años generó, por ejemplo, que muchos terrenos sean rellenados. Eso provocó que las cuencas que antes se usaban ya no sirvan para que el agua se escurra. Es así que se va acumulando en distintos sectores”.
García señaló en este sentido que “hay mucho que proyectar a futuro para estar prevenidos ante una contingencia similar”.
Lunes, 4 de noviembre de 2013