Después de un primer tiempo discreto, el Aurirrojo sacó claras diferencias en la segunda parte para concretar una goleada que le puso freno a un largo derrotero. Fue el partido estreno del nuevo director técnico Ricardo Rodríguez.
El fútbol suele tener ciertos giros extraños y muy propios. Después de arrastrar derrotas durante seis fechas consecutivas ayer el retorno al triunfo coincidió para Boca Unidos con la presentación en sociedad de su nuevo entrenador Ricardo Rodríguez. En su cancha, el Aurirrojo le ganó por 4-1 a Chacarita Juniors en el partido que levantó el telón de la vigésimo quinta fecha del torneo de la Primera B Nacional.
Además, la vuelta al carril ganador se dio con la felicidad del regreso de los goles dado que la victoria fue por goleada, con tantos de Juan Bravo, Gonzalo Rocaniere (en contra), Emanuel Dening y Nicolás Silva. El único tanto del Funebrero, que ahora lleva 15 fechas sin ganar, lo anotó Jorge Achucarro. Difícil será la misión que tendrá por delante su nuevo entrenador Fernando Gamboa.
Pero no todo en la tarde fueron goles y felicidad para el dueño de casa, que protagonizó un discreto primer tiempo y llegó a estar abajo en el marcador luego del gol convertido por Achucarro a los 19 minutos de la primera parte. Una sucesión de pases entre Matías Nizzo, Facundo Melivillo y Achucarro derivaron en la apertura del marcador ante una estática defensa local. Y a los pocos minutos casi aumentó la visita de no ser por la mala resolución de la jugada entre Melivillo y Achucarro.
Por pasajes con poco a Chacarita le alcanzó para incomodar al dueño de casa, que si bien arrancó con la pelota en sus pies y las mejores intenciones, careció de profundidad como para lastimar a su adversario.
El gol a los 42 minutos de Bravo terminó siendo un quiebre en el partido, luego del rebote capturado por el colombiano y su tiro cruzado a la red, tras el centro de Martín Fabro, después del empate se vino lo mejor del dueño de casa.
Antes del descanso Fabro robó una pelota y envió un centro atrás que nadie logró conectar, pero insinuó lo que se vendría después.
Es que en la segunda parte Boca Unidos salió decidido a ganarlo y lo hizo. Generó cinco chances netas de gol en 12 minutos y dos de estas aproximaciones terminaron con la pelota adentro del arco defendido por César Taborda.
Se lo perdieron al gol Fabro (remate alto a los 3), Lucas Oviedo (apenas ancho a los 4) y Dening (también por arriba del arco a los 5), aunque concretaron Rocaniere en contra tras un balón capturado por Dening y un centro atrás del propio goyano a los 10 minutos; y a los 12 el “Tecla” anotó el suyo valiéndose de una asistencia de Silva que coronó una rápida combinación de pases cortos en una jugada que Boca Unidos la inició tras presionar en la salida de un saque de banda del visitante.
El Aurirrojo cambió el chip en la segunda parte y una vez que tuvo la ventaja de los goles a su favor transitó el partido con serenidad. Rodríguez incluso se dio el gusto de mandar a dos pibes al campo, los casos de Ignacio Valsangiácomo (por Dening) y Germán Herrera (por Chaves), y cuando el partido ingresaba en la recta final se reforzó defensivamente con Emanuel Olivera (por Oviedo).
A Boca Unidos le faltaba un gol más, la joyita de la jornada: Fabro recuperó un balón que parecía perdido y Silva, tras sacar a pasear a los dos centrales y al arquero de una sola gambeta, con toque suave al arco sentenció el 4-1 a los 45 minutos.
Un giro positivo para el Aurirrojo, con goles y un triunfo muy necesario.
Sábado, 18 de julio de 2015