La cúpula de la entidad presentó ayer su renuncia. Primero lo hizo el presidente, Victor Fraschia, siguiendo los dirigentes de la “mesa chica”, al caer la sesión que pasó a cuarto intermedio por falta de quórum. El cuerpo se autoconvocó para mañana a las 21 para buscar una salida al conflicto.
La crisis en el fútbol capitalino llevó puesto al presidente de la Liga Correntina y a sus principales colaboradores, quienes presentaron ayer sus respectivas renuncias y dejaron virtualmente acéfala a la institución.
El primero en dimitir fue el titular de la entidad de la calle San Luis, Víctor Fraschia, quien señaló que su renuncia era con carácter de “indeclinable”.
“Todo fue conflicto, conflicto y conflicto, ya me cansó, no hay proyectos” manifestó en diálogo con Radio Sudamericana, quien estaba transitando el último año de su segundo mandato al frente de la Liga.
Anoche estaba convocado el Consejo Directivo, que había ingresado en un cuarto intermedio en la sesión del pasado martes, cuando se decidió levantar una sanción deportiva por seis meses aplicable a la primera división del Club Boca Unidos, y se aprobó el cuestionado boletín del 28 de abril.
El cuarto intermedio fue solicitado por los delegados de una mayoría de clubes que además exigían la renuncia de los integrantes del Tribunal de Disciplina.
Como esto no ocurrió, los delegados no dieron quórum para reanudar la sesión y la misma cayó.
Esto desencadenó la renuncia de los restantes integrantes de la “mesa chica” de la institución, como ser el caso de los vicepresidentes primero, Bruno Carlino, segundo, Jorge Terrile, el secretario General, Ramón Zamudio y el tesorero, Miguel Aranda.
Ahora el cuerpo se autoconvocó para mañana a las 21 para buscar una salida a la crisis en el fútbol local.
Jueves, 14 de mayo de 2015