Promover la cultura del trabajo y generar alimentos son parte de la campaña contra el hambre que a la que adhirió Cáritas, que inició impulsada por el papa Francisco, y que se extenderá hasta 2015.
El proyecto, denominado Ictus, fue puesto en marcha por Cáritas Arquidiocesana de Corrientes, en conjunto con la Fundación de las Vocaciones Sacerdotales de la Arquidiócesis (FUNVOCOR). Participarán “cultivando” peces, a cargo de las tareas técnicas del estanque, unos seis jóvenes de Paso Pesoa, a pocos kilómetros del mítico Puente Pexoa, en Riachuelo.
Este primer emprendimiento tendrá un rendimiento de unos mil kilos de pescado en poco menos de un año, que servirán para abastecer del producto a varios comedores que se vinculan a Cáritas en la ciudad Capital, y a los que concurren diariamente más de mil personas.
Pero además pretenden que sea una unidad productiva en la cual se realicen prácticas, de modo que pequeños productores de otras localidades, que tengan la intención de poner en marcha iniciativas similares, puedan aprender cómo funciona y el modo de llevar adelante un emprendimiento de estas características en sus localidades, y fomentar así el cooperativismo entre pequeños productores.
Asimismo, apuntan a que en 2015 se pueda abrir una segunda unidad de Ictus, esta vez en Itá Ibaté, y a partir de allí orientar parte de la producción a su comercialización en el mercado interno.
En Paso Pesoa, el proyecto comenzó a funcionar a partir de que una familia aportó el terreno para llevarlo adelante, y se realizó un convenio de comodato por 10 años para practicar la iniciativa. Personal técnico del Centro Nacional de Desarrollo Acuícola de la Nación (CENADAC), colaboró con la instalación del estanque y la capacitación, y al frente de los talleres y la puesta en marcha del proyecto estuvo Guillermo Faifer, un experto en el tema que además preside el Cluster Acuícola del NEA, y que integra FUNVOCOR como miembro.
En el primer estanque (de los varios proyectados), fue el mismo arzobispo, monseñor Andrés Stanovnik, (quien ejerce además como presidente de Cáritas y de la Fundación de Vocaciones Sacerdotales), quien liberó a los primeros ejemplares de pacú y de bagre dentro del agua. Así se concretó la primera “plantación de alevines” dentro del proyecto, que en principio servirá para “cosechar” unos mil kilos de pescado en un año.
Monseñor Stanovnik bendijo las instalaciones y, de manera especial, a los jóvenes que llevarán adelante la unidad productiva. “Es bueno dijo - estar en un acto como éste en el contexto irregular en el que se está viviendo”. A modo de comparación, consideró que “es como estar en dos Argentinas, por la violencia social que se vive y que se podría extender en los próximos días. Tenemos ante nosotros una Argentina profundamente desintegrada. Mientras aquí vemos otra cara, con integración amplia, plural. Ya que está presente el Ejecutivo, hay legisladores; están instituciones como la Iglesia y personas individuales. Cuando la inteligencia y la voluntad están al servicio del ser humano uno recupera la esperanza”, sostuvo.
De la inauguración participaron también el vicegobernador de la provincia, Gustavo Canteros, legisladores provinciales, y funcionarios municipales de Riachuelo. “Estar al servicio del ser humano es apostar por su progreso material y espiritual; y eso es posible si nos encontramos, su sumamos voluntades y esfuerzos”, destacó.
En el mismo sentido, subrayó el acompañamiento de la Iglesia para iniciativas que “busquen el bien del ser humano”. Y pidió a las autoridades, que, en representación del Estado, son los responsables de convocar a las instituciones a trabajar en conjunto, más allá de las diferencias, en el desarrollo de políticas orientadas al bien común.
“Este es el primero de estos emprendimientos que se ponen en marcha, y el año que viene pretendemos inaugurar otro en Itá Ibaté”, anticipó a época la vicedirectora de Cáritas en Corrientes, Lourdes Senio. De este modo, se abastecerá en principio a los comedores del barrio Quinta Ferré, San José y Sagrado Corazón, donde se ofrece pescado como parte del menú una vez por semana. “La idea es acompañar el proceso con una campaña de alimentación sana, en el marco del programa contra el hambre”, precisó Senio.
Las instalaciones en Paso Pesoa consisten en un estanque para la cría de peces que mide unos 20 por 60 metros, y que con el agua de las lluvias pudo llenarse. No obstante, quienes encabezan la iniciativa aprovecharon también la presencia de autoridades provinciales para solicitar la conexión de luz eléctrica en el predio y bien la provisión de un generador, que servirá para instalar una bomba de agua y abastecer así al estanque en el futuro.
Un espacio para las familias
El predio fue cedido en comodato por una familia para la puesta en marcha de la incitativa, y se ubica a pocos metros de la rotonda de Paso Pesoa.
El lugar, abundante en vegetación, posee además las características propicias de suelo y agua para que el emprendimiento prospere, explicó Guillermo Faifer, director técnico del proyecto.
Con vistas al futuro, desde Cáritas evalúan otra alternativa que podría sumarse al emprendimiento: el funcionamiento “al estilo brasileño” de los campings de “pesque y pague”, donde pueda “abrirse un espacio de recreación para las familias, donde puedan pasar el día, pescar, cocinar sus propios peces”, explicó Senio. El mismo sistema, de “pesque y pague”, ya se implementa en otros establecimientos productivos acuícolas, con mucho éxito, en distintas localidades de Misiones.
Cultivos hidropónicos
Los talleres de acuicultura, que es el nombre que recibe la actividad de “cultivar” peces en estanques, fueron coordinados y dictados por Guillermo Faifer, un especialista misionero que se desempeña en el Ministerio de la Producción de la vecina provincia, y quien además preside en Cluster Acuícula del NEA.
Este cluster agrupa a los productores de peces de las cuatro provincias de la región.
Como parte del proyecto desarrollado para FUNVOCOR y Cáritas, proponen también combinar las unidades productivas piscícolas con cultivos hidropónicos. Es decir, el cultivo de vegetales y algunas hortalizas que habitualmente crecen en una huerta, pero dentro de un medio líquido. Así, los estanques tendrían un doble aprovechamiento productivo.
Sábado, 14 de diciembre de 2013