El plantel “xeneize” realizó una práctica en Casa Amarilla, en la que el entrenador dispuso un trabajo con pelota, de cara al partido ante el "Canalla", mientras define el reemplazante del mediocampista central.
Mientras Bianchi sigue pensando aún en el puesto que le falta cubrir en el mediocampo por la lesión de Gago, en la práctica de de este jueves se vio correr sin problemas a Cristian Erbes, quien jugó el domingo pasado en el triunfo 1-0 ante River, cuando regresó al primer equipo tras haberse desgarrado dos semanas antes.
Erbes no demostró problemas hoy en el entrenamiento (no participó del táctico), pero se descuenta que jugará el domingo ante el equipo rosarino, aunque Bianchi aún no definió el once que buscará seguir prendido en la lucha por el campeonato, algo que comenzará a develarse mañana en la práctica de fútbol.
Las posibilidades con las que cuenta Bianchi para rearmar el mediocampo son varias: puede jugar Gonzalo Escalante si es que Jesús Méndez sigue en el puesto de marcador de punta, aunque otra variante sería con Alan Aguirre de `cuatro`, y Méndez como volante junto con Erbes, Juan Sánchez Miño y Juan Román Riquelme.
Sin embargo, no sería descabellado que mañana a las 10, en la práctica de fútbol, Bianchi pruebe a Pablo Ledesma, quien se entrenó ayer por la tarde y hoy estuvo en Casa Amarilla para hablar con los médicos.
Cabe recordar que Boca nunca informó oficialmente que Ledesma tuviera paperas, y tampoco se conocieron los estudios que supuestamente iban a ser difundidos el viernes pasado.
En cuanto al táctico, de un lado estuvieron Claudio Pérez, Matías Caruzzo, Daniel ´Cata´ Díaz, Diego Rivero, Federico Bravo, Jesús Méndez y Emmanuel Gigliotti, y del otro jugó un equipo formado por juveniles y futbolistas de la reserva.
A quien se vio muy bien físicamente y con el conocido nivel futbolístico que lo ubica como el referente de Boca, fue a Juan Román Riquelme, quien fue buscado con insistencia por sus compañeros a la hora del toque continuado.
Es que el ejercicio táctico diseñado por Bianchi consistió en un juego con pelota, sin arcos, en donde cada equipo debe realizar 10 toques seguidos sin perder el balón y de ese modo suma un punto.
En esos ejercicios, Boca pudo disfrutar de otra buena noticia: entre los que corrieron y se entrenaron con la pelota, estuvo Diego Rivero, quien de a poco va dejando atrás las secuelas de la arritmia que lo afectó meses atrás, y que lo alejó del fútbol competitivo.
Si bien no hubo en estos días información oficial desde el departamento médico de Boca respecto de la evolución del ´Burrito´ Rivero, el jugador esta semana se entrenó a la par de sus compañeros del plantel.
Por el lado de los lesionados, Gago y Nahuel Zárate corrieron aparte, alrededor de la cancha, pero a diferencia de ´Pintita´, el marcador de punta -quien no se entrenó en forma normal en toda la semana- llegaría en condiciones para el domingo, mientras que Gago regresaría ante Godoy Cruz, por la 12da. fecha.
Otro que se recupera rápido es Ribair Rodríguez, quien hoy estuvo en kinesiología y luego corrió intensamente, por lo cual el martes próximo ya estaría para entrenarse a la par de sus compañeros.
Joel Acosta, Emanuel Insúa, Leandro Marín, Francisco Di Franco y Franco Cángele (ayer jugó en reserva ante Argentinos Juniors y salió con un golpe en la rodilla) participaron de la charla previa que dio Bianchi con todo el grupo y luego pasaron por kinesiología.
En tanto, Guillermo Burdisso, Claudio Riaño, Nicolás Blandi, Leandro Paredes y Sebastián D´Angelo corrieron aparte, debido a que ayer jugaron el encuentro de reserva que Boca le ganó 4-3 al ´Bicho´ de La Paternal.
Boca se volverá a entrenar mañana desde las 10, a puertas cerradas, y seguramente Bianchi pondrá en cancha el posible once para enfrentar a Central, el domingo desde las 18.15 por la 11ma. fecha, con arbitraje de Diego Ceballos.
Como todos los viernes, pero esta vez a las 12, Bianchi dará su habitual conferencia de prensa.
Viernes, 11 de octubre de 2013
