Trabajadores del sector y la Asociación de Obreros y Empleados Municipales mostraron su indignación por los últimos incidentes.
Ayer se registró un nuevo hecho de violencia a un inspector de tránsito de esta ciudad. El episodio fue en la tarde de ayer cuando el agente municipal Ángel Cosimi intentó demorar la marcha de un automóvil Volkswagen Fox de color blanco. Según datos oficiales, al parecer el conductor del auto
-oriundo de la provincia de Chaco- habría intentado seguir su marcha por lo que el funcionario se le interpuso delante, lo que provocó que sea atropellado por el automóvil (ver página 22). Éste es uno de los casos que a diario padecen los inspectores de esta ciudad. Hace dos semanas se registró un caso similar en la esquina de Bolívar y San Juan. En este caso el agente de tránsito interrumpió la marcha de una motociclista que viajaba sin casco.
El llamado de atención provocó la ira de conductor de la moto que comenzó a agredir verbalmente y posteriormente optó por la física al empleado municipal de la dirección transito.
Este hecho generó la reacción de la Asociación de Obreros y Empleados Municipales (AOEM). La titular de este gremio hizo saber a la comunidad la preocupación por los distintos casos de violencia a inspectores de tránsito.
“No debemos permitir más estos casos”, dijo la titular del gremio.
Otro de los casos denunciados fue el que vivió el inspector de apellido Olivare. Este empleado sufrió la agresión de un individuo alcoholizado, quien con una botella le propinó cortes por distintas partes del cuerpo.
Vale recordar que el Concejo Deliberante aprobó una Ordenanza en el que se estipula sanciones máximas de 5 años de inhabilitación al conductor.
“Tenemos ordenanzas que protegen nuestra actividad pero muchas veces la negligencia de la gente es mayor”, dijo un alto funcionario de la Dirección de Tránsito.
Martes, 10 de julio de 2012