En la tercer y última jornada de juicio testificaron tres personas, hubo alegatos y luego dictado de sentencia. El imputado fue retirado con una fuerte custodia, lo insultaron los familiares de la víctima. En los próximos días será trasladado a una cárcel capitalina.
La tercera y última jornada del juicio oral y público que se le siguió a Carlos Lerena, por el brutal homicidio de Horacio Rodríguez Videla, terminó con la condena a prisión perpetua del único imputado por el horrible asesinato y descuartizamiento del empresario ganadero mercedeño, ocurrido el 4 de agosto de 2010. Hubo satisfacción de la familia y amigos de la víctima y también una catarata de insultos contra el asesino.
Tras una extensa jornada, que arrancó con el relato de los últimos tres testigos, luego los alegatos de las partes y el ministerio público fiscal, los jueces Romelio Díaz Colodrero, Carlos Giliard y Lucio López Lecube, decidieron sentenciar, por unanimidad, a Carlos Sergio Lerena a la pena de prisión perpetua, la máxima pena establecida en el Código Penal que será efectiva en una cárcel común y no en una celda de la alcaidía de Goya, como estuvo hasta el momento, según dejaron trascender fuentes judiciales.
Pero la jornada no fue una más, fuera del edificio del tribunal, la calle estaba repleta de familiares y amigos de la víctima, pero además de una treintena de policías que llegaron para reforzar la seguridad, tanto adentro, como afuera del lugar para impedir que ocurran incidentes entre quienes asistían a la audiencia.
Lerena estuvo en una habitación contigua a la sala de debates y luego fue ingresado para escuchar la sentencia.
Su rostro no dejaba ver alguna señal de culpa por lo ocurrido. De hecho tras el dictado de la sentencia siguió impávido, como si no hubiese querido escuchar que pasaría el resto de lo que le queda de vida en una celda.
De golpe, la sentencia despertó el llanto entre los familiares de Rodríguez Videla, el hijo y la hermana de la víctima se abrazaron, demostrando su satisfacción por el veredicto de los jueces.
Un veredicto que sin dudas esperaban desde el momento mismo del hecho. Un veredicto, que también despertó un desahogo, que dio paso a insultos irreproducibles en contra de Lerena quien ni siquiera podía mirar a quienes se lo gritaban. Fue retirado rápidamente de la sala.
La lectura de la condena, no le llevó más de 10 minutos al secretario del Tribunal, ya que el fallo completo, será leído el próximo 25 de julio a las 12 en el mismo lugar.
“Asesino..., asesino, te vas a podrir en la cárcel”, gritaban algunos de los familiares. “Esto es una obra de Dios, porque Horacio está vivo”, gritó Charo Páiz, hermana de Rodríguez Videla.
La camioneta, en la que lo subieron los efectivos policiales a Lerena, tomó en contramano a toda velocidad hacia la comisaría Primera, donde quedó alojado provisoriamente, hasta tanto sea retirado por el Servicio Penitenciario y llevado hacia la cárcel de Corrientes.
Se espera que la defensa de Lerena a cargo del doctor Víctor Patti, apele el fallo ante el tribunal de casación y como última instancia, podría recurrir también hasta la Corte Suprema, pero a decir de las pruebas en contra del imputado, es casi imposible que prosperen.
El juicio contra Carlos Lerena demandó solo tres días y por los estrados pasaron 18 testigos. Varios de ellos empleados del autor del crimen. Rodríguez Videla fue asesinado, en Goya, en la casa de Lerena, cuando llegó para cobrarle $160.000 de una deuda contraída por el acusado hacía mucho tiempo.
Jueves, 5 de julio de 2012
