El Trece emitió el último capítulo de la ficción producida por Pol-ka, Herederos de una venganza, en el que se pudo ver el gran enfrentamiento del bien contra el mal en el que, obviamente, el bien venció y los protagonistas cumplieron el sueño de casarse.
A Antonio (Luciano Castro) ya no le quedaban fuerzas: estaba a punto de morir desangrado. Por su parte, Benicio (Benjamín Vicuña) disfrutaba al ver como su enemigo había quedado a su merced ya que, muy pronto, él sería quien decida el destino de Vidisterra, un destino oscuro y peligroso.
Pero, para asegurarse de que "El Forastero" no burle, una vez más, la muerte, Benicio desató un incendio en el lugar, sin contar con que Mercedes (Romina Gaetani), en ese mismo momento, se hacía presente allí para intentar salvar a Antonio.
Cuando Mercedes llegó a la puerta del lugar, una explosión le impidió ingresar. Todo voló en mil pedazos, las llamas avanzaron y devoraron todo a su paso. No había señales de vida y todo parecía indicar que Antonio había muerto incinerado.
Paralelamente, Rafael (Federico Amador) llevó a Lucas (Marco Antonio Caponi) a un alejado lugar en el bosque. Allí lo redujo y golpeó salvajemente dispuesto a matarlo. Entonces, llegó Emilia (Marcela Kloosterboer), pistola en mano, y apuntó directamente al agresor.
Finalmente, el bien venció y se pudo ver cómo lograron cambiar el destino de Vidisterra. Antonio y Mercedes se casaron y realizaron una importante fiesta para todo el pueblo.
Martes, 14 de febrero de 2012
