La pequeña llamada Julia no pudo resistir las complicaciones surgidas luego de su nacimiento prematuro a los siete meses.
Una fiscalía investiga el caso.
Julia Foster, la beba nacida de urgencia tras la muerte de su madre por un pico de alta presión cuando recorría con su familia una muestra en la localidad de Vicente López, también falleció durante las últimas horas al no poder resistir las complicaciones de su alumbramiento prematuro a los siete meses.
La noticia golpeó dos veces. Primero fue la conmoción por la muerte de Antonella Inés Prieto, una docente de nivel inicial que había llegado a Pergamino para pasar unos días de vacaciones y se descompensó súbitamente. Luego, la esperanza de que los médicos lograran salvar a su beba tras practicarle una cesárea de urgencia. Pero este jueves se supo que la beba también falleció. La tragedia se completó. Y con ella, el dolor de toda una comunidad que ahora recuerda a Antonella no sólo como una gran madre, sino también como una mujer luminosa, amorosa y comprometida con la infancia.
Antonella tenía 31 años y era mamá de Felipe, un nene de dos. Estaba embarazada de su segunda hija, en un embarazo que, según contaron allegados, transcurría con total normalidad. No había tenido problemas de salud ni antecedentes médicos que hicieran prever una complicación.
Había viajado desde Buenos Aires hasta Pergamino para tomarse un descanso. Según fuentes de la investigación, la mujer se descompensó el martes por la tarde mientras visitaba la muestra Dinosaurios Mundo Jurásico en Buenos Aires que se desarrolla en el salón de eventos El Cubo, en el Complejo Al Río, al 101 de la avenida del Libertador.
Hasta allí llegaron de urgencia médicos del SAME que le dieron "asistencia y maniobras de reanimación" dado que comprobaron que "había sufrido un paro cardiorrespiratorio".
La mujer fue trasladada "en estado crítico a la Maternidad Santa Rosa, donde lamentablemente ingresó sin signos vitales", añadieron fuentes vinculadas al caso y remarcaron que pese a los esfuerzos médicos fue imposible reanimarla.
Segun cuentan Antonella, alrededor de las 17.10, mientras recorría la exposición, dejó de caminar, comenzó a tocarse la cara con las manos y después desmayó.
Mientras algunos empleados del lugar apartaban al hijo de Prieto para que no viese la escena, un estudiante de medicina y una guardavidas que también visitaban la exposición intentaron reanimar a la mujer mientras esperaban que llegue la ambulancia. Sin embargo, según fuentes policiales, Antonella llegó al hospital sin signos de vida.
En tanto, en la clínica Maternidad Santa Rosa se realizó un parto de emergencia y una cesárea que permitió el nacimiento de la beba, quien finalmente también murió.
"Era todo amor": el recuerdo de una comunidad
Antonella era docente de nivel inicial. Había trabajado en el Jardín Mis Sueños 906 de Rancagua, una localidad cercana a Pergamino. En esa comunidad, su nombre quedó grabado en los recuerdos de madres, alumnas y colegas.
Una mamá que la conoció en esa etapa escribió en Facebook: “Una gran persona, una gran seño!! Te llevaremos y te recordaremos con mucho amor, seño Anto. Gracias por dejar una huella hermosa en el corazón de tu alumna... o como vos le decías: mi picarona Sheraldine”.
Esa misma madre contó más: “Anto era una excelente docente. Siempre los esperaba con una hermosa sonrisa. El amor con el que trabajaba... toda la buena predisposición y con todo el compromiso con el que se hacía cargo de nuestros niños era hermoso. Siempre se reía y a mi hija le decía ‘picarona Sheraldine’ porque era revoltosa. Siempre le encantaba la hora del cuento y ella le decía que era muy charleta. Pero la recordamos con todo el amor del mundo, porque eso brindaba, y se le notaba lo buena persona que era”.
Rancagua es un pueblo chico, y la noticia de la muerte de Antonella, aunque ella no vivía allí, impactó fuerte. Su familia sí es de la zona. "En un pueblo tan chiquito, donde todos nos saludamos y nos conocemos entre todos, es algo que impacta y que shockea", expresó otra madre.
“Fue una noticia impactante, la verdad. Primero porque formó parte de la infancia de nuestra hija, que si bien uno dice es un periodo corto... para nosotros fue un placer”, agregó.
Una seño, una mamá, una mujer querida
En las redes sociales se multiplicaron los mensajes de despedida y dolor. “Hermosa persona, tuve el privilegio de que fuera maestra de Lolo y todo era amor. Q.E.P.D. seño Anto y su pequeña bebita”, escribió otra madre.
Por su parte, Sofía González, una ex compañera de la facultad, también la recordó en una charla con Clarín: “Creo que el mundo debe conocer quién fue Antonella porque era un ser maravilloso."
Sofía no tenía contacto frecuente con ella desde 2014, pero seguían vinculadas en redes: “La veía feliz y ella sinceramente era una gran persona."
Además de Felipe, su hijo de dos años, Antonella estaba en pareja con Patricio Foster, el padre de ambos niños. Según contaron desde su entorno, era muy reservada con su vida privada y no solía compartir mucho en redes.
A partir de su muerte y la de su beba, las preguntas se multiplican. ¿Cómo se explica una tragedia tan repentina? ¿Cómo sigue una familia rota por tanto dolor? Las respuestas quizás tarden en llegar, pero en Rancagua, en Pergamino y entre quienes la conocieron, lo que queda claro es que Antonella fue una mujer profundamente querida, una madre amorosa, una docente comprometida y una presencia luminosa que dejó huella.
Según los primeros resultados de la autopsia, la mujer murió luego de sufrir un cuadro de preeclampsia (presión arterial alta), que habría sido el desencadenante del paro cardiorrespiratorio. "Era imposible salvarla" afirmaron fuentes cercanas a la investigación.
Además, indicaron que el marido de la mujer contó que su esposa no tenía problemas de salud y que estaba cursando un embarazo normal, con los controles habituales y en el que no se habían presentado complicaciones.
La muerte de Prieto es la segunda tragedia que golpea a la familia en lo que va del año. A principios de marzo Federico Foster, hermano del marido de la mujer que murió, había sido encontrado muerto en una playa de Punta del Este, de acuerdo a los medios de Pergamino.
Domingo, 27 de julio de 2025