El gobernador Gustavo Valdés, junto a funcionarios nacionales y provinciales, entregó las 200 viviendas del barrio Ponce. "Nosotros hacemos la vivienda, pero a ustedes les va a tocar construir un hogar", les dijo a los flamantes propietarios.
“Llegó el día”, dijo el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, como sacándose de encima la ansiedad de las 200 familias que esperaban emocionados tener en sus manos la llave de su casa. Esa casa propia soñada por miles y concretada a cuenta gotas por pocos, pero con la promesa renovada de las autoridades que también ansían con cumplir el sueño de todos.
El acto de entrega estaba previsto para las 17 y se demoró algunos minutos. Una multitud se dio cita en las inmediaciones del flamante vecindario de 200 casas que se suman a las 500 del Viejo Ponce para compartir la alegría de los nuevos propietarios. La ceremonia comenzó con la bendición de un sacerdote y las palabras profundamente emocionadas de una de las beneficiarias.
“No puedo creer estar pasando este momento tan especial, realmente es muy importante para mi porque estaba viviendo en un garage y hoy estoy recibiendo mi techo. Estoy muy agradecida e inmensamente feliz”, dijo con lágrimas en los ojos.
Luego hablaron Iván Kerr, el secretario de Viviendas de la Nación; el intendente Eduardo Tassano y el gobernador Gustavo Valdés. Todos coincidieron en la importancia de concretar estas obras y resaltaron la necesidad de continuar recibiendo fondos para llevar la solución habitacional a los miles de correntinos que no tienen casa.
Nota en desarrollo…
Miércoles, 5 de septiembre de 2018