El candidato del oficialismo reveló parte de las cartas que baraja en caso de llegar a la Presidencia. Gobernadores salientes, dirigentes del riñón del ex motonauta y nombres tapados pueblan un mapa con certezas e interrogantes. Esta semana terminó de "conformarse" el gabinete nacional de Daniel Scioli "de campaña", es decir aquel se da a trascender en el medio de la contienda para mostrar imagen de que el candidato está tan preparado para ganar, que hasta podría hacerse cargo del gobierno mañana mismo. Si el aspirante del FpV triunfa, el sciolismo habrá tenido hechos los deberes. Si en cambio, es derrotado, varios de los convocados lamentarán eternamente haberlo sido, como sucedió con el gabinete que nunca llego a existir de Carlos Menem en el 2003.
También se conocen los apellidos, porque los propios involucrados lo hacen circular, como una forma de lograr una confirmación en el cargo para el que supuestamente han sido convocados. Nadie quiere que le suceda lo que a aquel ministro de Tancredo Neves, que cansado de no ser llamado por el flamante presidente electo, hizo a correr el rumor de que efectivamente formaría parte del gobierno. Después de mucho peregrinar, logro que Neves lo recibiera. Preocupado, le consultó qué podía hacer con los rumores que lo perseguían acerca de su convocatoria. "Desmiéntalas" fue la breve respuesta del Presidente.
Muchos profesionales, pocos amigos, un solo familiar directo y, por sobre todo muy, muy poco kirchnerismo. Aquí debe recordarse que como producto del "Pacto de Junio" entre Cristina Kirchner y Scioli, los nombramientos del gobierno correrían por cuenta exclusiva del candidato, reservándose la Presidente una preeminencia en las listas para el Congreso, comenzando por la jefatura del Senado para Carlos Zannini.
Los dos K que seguirían en el gobierno son casi cantados: Sergio Berni, quien por fin ascendería, no a General, sino a Ministro de Seguridad, y Diego Bossio, ministro de Infraestructura. Junto con "Wado" de Pedro, en este caso a través de Alberto Pérez, el actual titular de la ANSES es el teléfono rojo entre la Presidente y Scioli nada menos que en materia económica. Una posición de enorme poder e influencia –que se notó en la cena de recaudación del FpV la semana pasada-, pero que requiere de toneladas de paciencia.
Télam
Juan Manuel Urtubey y Mario Blejer no contribuyeron en los últimos días -por decirlo de alguna manera- a alimentar la paz telefónica. Bossio logró el milagro de convertirse en el único ser humano conocido entre los 6.000 millones de habitantes del globo terráqueo en el que confían Cristina y Scioli, al mismo tiempo. Aunque él dice que sólo firma de vez en cuando algún cheque de una cuenta personal, es el responsable de la administración de los millones de cheques que mes a mes se traducen en los planes sociales, pilar fundacional del modelo kirchnerista. Su fanatismo por Racing fue el que permitió acceder a la intimidad del mundo K, primero con Néstor y ahora con Máximo.
La más obvia de las designaciones es la de Alberto Pérez en la Jefatura de Gabinete. Misma funciones, misma confianza con el candidato que en la provincia. "Pepe" Scioli es el más mencionado para la Secretaria General. Bajando del primer piso a la planta baja de la Casa Rosada, en la Secretaria Legal y Técnica podría ir el ex denarvaista Gustavo Ferrari.
Repetirían ministerios Ricardo Casal en Justicia, Oscar Cuartango en Trabajo y Alejandro Collia en Salud. Pertenecer al gabinete provincial evidentemente tiene sus privilegios.
Alberto Barbieri, actual rector de la UBA, ya fue hasta mencionado por el propio Scioli como el flamante titular de Educación. Miguel Peirano tiene todas las condiciones para conducir un Banco de Desarrollo (BICE), aunque también se lo menciona para una cartera de Industria, en la que encajaría Julián Domínguez.
De los actuales gobernadores que terminan mandato, Sergio Urribarri arribaría a Buenos Aires como ministro del Interior. Pidió mantener la secretaria de Transporte, y aparentemente el deseo fue concedido. El neuquino Jorge Sapag estaría al frente de la Secretaria (¿o Ministerio?) de Energía, mientras que el misionero Maurice Closs (en las PASO la boleta de Scioli-Zannini hizo una gran elección en la provincia de la tierra colorada) recalaría en Turismo. José Luis Gioja pretende un lugar preponderante en el Congreso: presidir la Cámara de Diputados o la jefatura del bloque oficialista. Se desconoce si como parte de los acuerdos entre CFK y DOS, esos sillones o al menos uno de ellos serán para el kirchnerismo. De ser así, Wado de Pedro tiene todas las fichas.
Defensa está rodeada de misterios. Para reemplazar a Agustín Rossi suenan el mendocino "Paco" Pérez y Alejandro Granados. Sobre el primero pesa la desconfianza que género su administración provincial y la derrota electoral local.
¿Y Economía? Si algo les sobra a los candidatos a Presidente este año son potenciales candidatos al Palacio de Hacienda. Silvina Batakis seguiría al frente en una carrera en la que también rankea bien Miguel Bein, aunque en las últimas horas se lo rumoreó más cerca del Banco Nación. El equipo económico del candidato recibió en las últimas horas un oportuno regalo: contra los pronósticos pesimistas de analistas políticos y colegas, Diputados dio esta semana media sanción a la prórroga de la Emergencia Económica, pieza jurídica clave para conducir el Palacio de Hacienda desde hace más de una década. Curioso: la decisión parlamentaria del kirchnerismo (y aliados, lo que incluye diputados de candidaturas a Presidente enfrentados al FpV) a favor del que gane pasó sin pena ni gloria, ni alteró la extensa y eterna campaña cada día más carente de ideas e innovaciones.
La continuidad de Enrique Vanoli –famoso por sus cartas manuscritas al candidato- al frente del Banco Central y/o su reemplazo pertenecen al mundo de lo desconocido. Igual situación para Miguel Galuccio en YPF, confirmado en su momento por Mauricio Macri en caso de ganar.
NA
La mayor parte del "circulo naranja" dice que Juan Manuel Urtubey es numero puesto en Cancillería, como así también Mario Blejer para embajador en Londres, ciudad que conoce por haber sido director del Bank of England. Los dos, más quien sea designado Secretario de Finanzas, conformarían la "task forcé" para negociar con los holdouts. Para Finanzas se habla del regreso de Adrián Consentino o de la repatriación de Sergio Chodos, actual representante argentino ante el Fondo Monetario. Pese a ser abogado, Chodos –una mezcla de Ben Stiller y Adam Sandler de las finanzas internacionales- es uno de los mayores expertos en el tema y cuenta con la experiencia de haber participado de la renegociación de la deuda versión Lavagna. Mientras que Luis María Kreckler, actual embajador en Brasilia, es mencionado para ir a Washington, aunque otros lo ubican en carrera con Urtubey por la Cancillería. Tampoco que hay que descartar para un sillón importante a Andrés Cisneros, vicecanciller de Guido Di Tella.
Hay más de política exterior, uno de los tópicos donde mayor es la distancia entre el sciolismo y el mundo K: los dos expertos que más han representado al gobernador en foros en el último año han sido el embajador Ricardo Lagorio –probablemente el diplomático de carrera que más conozca de las relaciones argentino-norteamericana- y el joven Mariano Caucino, experto en el otro rincón del planeta, la Rusia de Vladimir Putin. Todo tiene que ver con todo: el cumpleaños 80 de Carlos Corach se festejó en la casa de Caucino en Barrio Parque. Corach será un "asesor presidencial". De consulta diaria con el candidato, Corach es el autor intelectual del "Scioli K", el principal impulsor de que no rompiera con Cristina, y que esperara con paciencia su "momentum". El 25-O o eventualmente el 22-N se sabrá si el camino elegido fue el correcto.
Quedan nombres sin cargos y cargos sin nombres. Sin duda el sillón más importante cuyo posible ocupante no ha trascendido –probablemente por la materia de la que se trata- es el del titular de la AFI, la flamante Agencia Federal de Inteligencia, ex SIDE. Jorge Telerman es un nombre que va desde un posible Secretario de Cultura a Secretario de Medios, aunque en el sciolismo se dice medio en serio medio en sorna que este último cargo estará a cargo del propio Presidente. A propósito, ¿tendrá vocero presidencial Scioli en caso de ganar?
¿Y Gabriel Mariotto? Si Aníbal Fernández gana la provincia, el titular de la AFSCA Martin Sabatella se tendrá que mudar a La Plata para convertirse en vicegobernador, dejando libre uno de los cargos más calientes del futuro gobierno porque marcará la política de Scioli con los medios de comunicación, la que se presupone completamente distinta a la actual.
Más incertidumbre y menos certeza hay en relación al Poder Judicial. Más allá de las estabilidad de los cargos, nadie sabe qué sucederá con la polémica Alejandra Gils Carbo y menos todavía con los dos nombramientos para cubrir las vacantes en la Corte Suprema. ¿Un peronista y un radical en un acuerdo de bloques en el Senado? Como tantas otras cosas, para develar la incógnita habrá que esperar. Cada día falta menos.
Lunes, 12 de octubre de 2015