Hace siete meses se instalaron en la zona límite con el barrio Punta Taitalo. Afecta al estatus internacional de la terminal aérea.
A fines del año pasado, un grupo de familias se asentó en un terreno del barrio Punta Taitalo. No eran más de 50 pero pronto, producto del déficit habitacional y las posibilidades casi nulas de conseguir una vivienda, más grupos familiares llegaron a la zona y el asentamiento creció y se extendió hacia terrenos del Aeropuerto “Piragine Niveyro”. Los okupas reclamaron que la Justicia u otro estamento del Estado acudan en solución a la precaria situación en la que se encontraban, pero no tuvieron eco. Sin embargo, ahora el Gobierno decidió avanzar con la reubicación de por lo menos 100 de ellas para optimizar la operatividad de la terminal de aviones, mientras siguen las refacciones en el lugar.
“Hay unas 100 familias ocupando terrenos del Aeropuerto, que no puede operar como internacional en esas condiciones. Están dentro de los límites, por lo que serán reubicadas”, comentó a NORTE de Corrientes el subsecretario de Derechos Humanos de la Provincia, Manuel Cuevas.
Esta semana, la Dirección General de Catastro informará a la oficina de Cuevas sobre los límites precisos del Aeropuerto para determinar con exactitud el terreno que se encuentra usurpado, para luego mover a las familias “fuera de esa línea”, comentó el funcionario.
El predio fue tomado por habitantes del Molina Punta y del Taitalo que fueron desplazándose hacia esa zona al dejar las viviendas que alquilaban por dificultades para afrontar el pago. Cuando llegaron, sólo algunos sectores del terreno estaban alambrados pero la totalidad se encontraba con mucha maleza, por lo que se encargaron de la limpieza. Demarcaron en partes el lugar y a cada familia se asignó un espacio de 10 x 30 metros. Luego levantaron precarias casillas con troncos, maderas y plásticos e hicieron conexiones irregulares de la red de energía.
Así permanecieron todos estos meses, hasta que se iniciaron las obras de refacción en el “Piragine Niveyro”. Dos empresas llegaron hasta el predio, ubicado a unos 10 kilómetros del centro de la ciudad, por la ruta nacional 12, para realizar trabajos tendientes a lograr un salto de calidad en materia de seguridad y mayores garantías durante los días de lluvia con la optimización en las pistas de rodaje y aterrizaje y la colocación de 10 metros de estabilizador granulado en ambas márgenes de la pista de descenso.
Pero las acciones no se circunscribirán al área central, sino a todo predio. Por ello, se despejará de okupas el ex “Camba Punta”. Con ese cometido, funcionarios provinciales recorrerán la zona luego de contar con certeros datos catastrales e iniciarán rees con las familias a trasladar.
CAMINO A LA REGULARIZACIÓN
Con las leyes de expropiación y donación aprobadas en favor de cinco asentamientos, más de mil familias se convertirán en propietarios de los terrenos que ocupan, muchos de ellos desde hace más de 20 años. El más avanzado es el Virgen de los Dolores, donde habitan 127 familias. Esta semana se notificará al propietario del predio usurpado -que tiene una extensión de más de dos hectáreas- el monto definido para la indemnización -$3.210.000- y tras el pago concluir con el proceso administrativo para dar lugar al Instituto de Vivienda de Corrientes (Invico). En el lugar se proyecta un plan de urbanización, previa erradicación de las actuales viviendas, construidas con maderas, chapas y ladrillos.
Cada familia ocupa un espacio de 10m x 30m. Se extendieron hasta el Aeropuerto.
En busca de ordenanza
La Subsecretaría de Derechos Humanos buscará a través del Concejo Deliberante que la Comuna declare los terrenos usurpados del barrio Pirayuí como zona urbana con el fin de avanzar con la regularización. La intención es que los ediles presenten un proyecto de ordenanza para la declaración de las 43 hectáreas usurpadas en 2012. Estiman que este cambio favorecería las negociaciones con los propietarios.
Lunes, 28 de julio de 2014