En Curitiba, fanáticos de Atlético Paranaense y Vasco Da Gama se enfrentaron en un feroz cuerpo a cuerpo. Cuatro heridos de gravedad reportan medios locales. Vasco y Fluminense se fueron al descenso
La batalla campal, que se produjo en las tribunas durante el partido entre Atlético Paranaense y Vasco Da Gama, dejó un saldo de cuatro heridos de extrema gravedad. Los primeros trascendidos de la prensa brasileña anticipaban una victima fatal, pero aún no fue oficializado.
El partido se detuvo a los 16 minutos del primer tiempo, cuando los simpatizantes del Vasco fueron en búsqueda de los hinchas locales y se desató una vergonzosa y salvaje pelea. A los pocos minutos, un helicóptero y dos ambulancias llegaron al estadio para asistir a los heridos.
La policía militar no se encontraba en las gradas por decisión del Ministerio Público, pero a los cinco minutos debió hacerse presente en la zona de conflicto para separar y dispersar a los violentos. Los agentes de seguridad privada poco podían hacer para evitarlo.
“Esto no es un circo. Es ocio, un evento deportivo. No aceptamos eso. Yo, por mi parte, no sigo el juego”, declaró el vicepresidente general de Vasco da Gama Antonio Peralta, aceptando el descenso de su equipo antes de la reanudación del encuentro.
Sin embargo, el juez resolvió continuar el juego de manera insólita pese a las malas noticias que llegaban con los heridos y Paranaense goleó 5-1 al equipo carioca para decretar su descenso.
Lunes, 9 de diciembre de 2013