El Rojo volvió a entrenarse con amargura tras el empate con Boca y sufrió dos nuevas complicaciones: el derrumbe en uno de los paredones del predio de Domínico y la falta de agua en el vestuario profesional. Mañana y el miércoles se entrenarán en el predio de la AFA, en vistas al duelo del viernes contra All Boys.
En la vuelta al trabajo luego del empate de ayer con Boca, el plantel de Independiente se entrenó bajo presencia de una fuerte custodia policial, que llegó hasta Villa Domínico a raíz del derrumbe de uno de los paredones perimetrales del predio.
Un rato más tarde, también llegaron los bomberos porque el vestuario de fútbol profesional se quedó sin agua. La dirigencia que encabeza Javier Cantero tiene cuatro días para realizar la refacción antes de visitar a All Boys. Mañana y pasado, el entrenamiento será en el predio de la AFA.
En vistas al duelo del viernes, Hernán Fredes está descartado por haber acumulado cinco amarillas. Reaparecerá Osmar Ferreyra, mientras que la duda que se reactiva tiene como protagonistas a Juan Caicedo y Ernesto Farías.
Martes, 2 de abril de 2013