Aún sin conocer la ubicación que les corresponderá en el corsodromo, los remiseros que prestarán el servicio en cada jornada, evalúan las posibilidades para que el trabajo resulte rentable.
La preocupación, según explicó Juan Castillo, titular de la Asociación de Remises de Corrientes, a Radio Continental, radica en que "la demanda será elevada solo para ida y para regreso del corsódromo, mientras que la espera de los móviles en el predio podría resentir el servicio en la ciudad".
"Estamos viendo la conveniencia económica", señaló el remisero, a lo que agregó que "y cómo se logran que los móviles vayan vacíos a buscar la gente, ya que en muchos casos puede haber demanda también en el núcleo de la ciudad, y eso podría generar demoras en el regreso".
Debido a las complicaciones económicas que el sector deberá subsanar, se descartó la posibilidad de aplicar una tarifa diferenciada, ya que la tarifa depende de los choferes, por lo que no será establecida desde las empresas.
Miércoles, 23 de enero de 2013
