La mamá de la chica de 22 años recibió la imagen en su correo electrónico y casi se infarta. Por fortuna, todo se trató de una broma que le hizo su hija por ser tan sobreprotectora. Los detalles de la "jodita", en la nota.
Samantha Bush, de 22 años, le anunció a su mamá que se iría de paseo al Gran Cañón, en Arizona, Estados Unidos, junto con su novio.
Sin embargo, la mujer, muy preocupada, le decía que era muy riesgoso ir allí e intentó convencerla para que no hiciera el viaje, aunque no lo logró.
Para curar de espanto a su mama, o simplemente como escarmiento para que no la sobreproteja más, la joven no tuvo mejor idea que sacarse una foto simulando estar cayendo desde un precipicio y enviársela a su mamá, que casi se desmaya al ver la imagen.
En realidad, Samantha no estaba a punto de caer sino que estaba parada sobre una plataforma que estaba más abajo de la roca de la que se sujetaba.
"Mamá se sintió aliviada cuando supo que se trataba de una broma, pero al principio se enojó mucho", comentó la joven al sitio ABCNews.com.
Martes, 27 de noviembre de 2012
