Fue casi como un cuento de hadas, en el que la princesa es salvada por un plebeyo. Le sucedió a la morocha mientras iba a la fiesta de la revista Caras. Su auto (un último modelo) se quedó sin nafta, una goma pinchada y no quiso arrancar. Hubo un viejito de la década del ´70 que la ayudó.
Zaira no parece ser muy precavida con las cuestiones automovilísticas. Al menos a juzgar por un pequeño incidente que se le presentó cuando iba a la gala que se lleva a cabo en el Tattersall.
La bella conductora venía quedándose sin nafta, y para colmo pinchó una goma. Luego sumó la desgracia de que el bello auto negro tampoco quería arrancar, y la modelo llegaba tarde.
Pero llegó el auxilio. Un modesto (aunque siempre fiel) Dodge 1500 color naranja accedió a rescatarla de la incómoda situación, y Zaira recibió la ayuda que le permitió continuar su viaje.
Merece la foto, el milki…
Miércoles, 21 de noviembre de 2012