Un hombre se dirigía hasta la terminal de ómnibus. Al colocar el bolso en el asiento delantero y cerrar la puerta el chofer escapó. Ocurrió en el barrio Libertad. El damnificado mencionó que se trataba de un automóvil Fiat Uno blanco pero no recuerda el nombre de la empresa. La denuncia fue radicada en la Policía.
Tantas veces fueron noticias los remiseros por reiterados asaltos que en esta ocasión un trabajador al volante fue el que delinquió. No se sabe a ciencia exacta si es remisero de profesión o es un delincuente que maneja un vehículo con un cartel perteneciente a una empresa. Lo cierto es que un joven que iba a viajar a la provincia de Buenos Aires abordó en la zona céntrica un remis, pero no llegó a subir. En el asiento delantero colocó su valija y al cerrar la puerta para luego subir al de atrás el automovilista aceleró la marcha y se dio velozmente a la fuga.
Meses atrás se radicaron varias denuncias con respecto a las modalidades empleadas por supuestos remiseros. Por el hecho no hay detenidos, pero el damnificado apunta a un automóvil Fiat Uno blanco, similar al que se habría utilizado en los delitos cometidos anteriormente. También, al momento de abordar un remis en la vía pública, hay que tomar todos los recaudos necesarios para no ser blanco de un delito.
De acuerdo a las primeras averiguaciones brindadas por fuentes consultadas, el llamativo hecho delictivo ocurrió el miércoles en el cruce de las calles España y Moreno, del barrio Libertad, cuando un hombre identificado como Fernando Sosa, de 43 años, hizo señas a un remisero para que se detuviera. El trabajador al volante acudió rápidamente al pedido y se estacionó junto al cordón.
La nueva modalidad tiene que ver justamente con remiseros, quienes en innumerables ocasiones fueron asaltados y golpeados por sus propios pasajeros. A punta de pistola o cuchillo le robaron sus pertenencias. El pasajero tras saludar y entablar una breve conversación con el chofer, quien no descendió del rodado, pidió permiso para colocar una valija en en asiento delantero del lado del acompañante.
Una vez colocado el bolso en el asiento, Sosa cerró la puerta para abrir la de atrás que le permitiera subir pero no pudo. En ese breve interín y de manera más que rápida, el remisero aceleró la marcha y se dio velozmente a la fuga.
El damnificado, quien iba a subir al remis para trasladarse hasta la terminal de de ómnibus, ya que tenía pasaje de ida para viajar hasta la provincia de Buenos Aires, quedó sorprendido por el accionar y se acercó hasta la Comisaría Tercera para radicar la correspondiente denuncia.
Sosa contó que recuerda que se trataba de un automóvil Fiat Uno blanco de cinco puertas, pero no pudo divisar la patente ni recuerda el nombre de la supuesta empresa de remis. En su denuncia contó que en la valija tenía prendas de vestir, zapatos y los pasajes de ida para la provincia de Buenos Aires.
“Son falsos remiseros que recorren la ciudad”, dijeron fuentes consultadas. Ahora también hay que cuidarse del accionar delictivo de los remises ficticios que buscan a sus víctimas en distintas zonas de la capital correntina.
Viernes, 28 de septiembre de 2012
