El conjunto de Darío Ortiz sucumbió ahora a manos del Charro. Nuevamente el equipo estuvo carente de juego. Tercera derrota al hilo, y es el único que no sumó puntos en el torneo.



Boca Unidos llevó a Buenos Aires sus necesidades, y con ellas sus carencias. Esas mismas que en tres fechas lo tienen hoy sumido en el fondo de la tabla de posiciones, último y sin puntos. El rival de turno era el ideal para evidenciar un cambio, Deportivo Merlo, pero nada cambió y el Charro, con muy poco, le asestó otro golpe duro al conjunto que dirige Darío Ortíz.
Pasó la 3ª fecha del torneo de la B Nacional para el equipo correntino y la mejoría no llega, o por lo menos se muestra con cuentagotas, como sucedió con Rosario Central. Lo del Charro por su parte no fue más, simplemente fue lo necesario ante un rival sin respuestas. Explotó su mejor arma y aprovechó uno de los principales problemas de su rival, las pelotas paradas. Así, Merlo venció en la tarde de ayer como local en el estadio de Tristán Suárez a Boca Unidos por 1 a 0, con gol de Leandro Lázzaro, a 15 minutos del final.
El encuentro se debió haber jugado el sábado en el estadio de Deportivo Merlo, pero por un enfrentamiento entre barrabravas del equipo bonaerense se postergó para ayer.
El trámite del cotejo fue aburrido, no hubo muchas situaciones de riesgo; los locales supieron aprovechar sus chances y ganaron gracias al gol de Lázzaro, quien había ingresado en la parte final.
Lo hecho por Boca Unidos en tanto no fue más que otra muestra de la falta de identidad en su juego, porque pese a las rotaciones que dispuso el entrenador para este partido el equipo sigue si aparecer. Los puntos positivos del elenco correntino, ayer, en el estadio Tristán Suárez fueron Gonzalo Ríos y Diego Sánchez Paredes, jugadores que evidenciaron los únicos lapsos de claridad a la hora de generar juego, pero que de igual forma no contaron con apoyo del resto para poder desequilibrar el partido a su favor.
Sigue siendo prematuro pensar en un cambio en la conducción, tanto porque no sería saludable para el club de la Ribera, como porque las pocas fechas jugadas del torneo no lo ameritan, pero cierto es que Ortíz deberá poner las cartas sobre la mesa en la semana para encontrar una formación que le dé identidad a su propuesta y pueda plasmar en la cancha sus intenciones de juego, en lo inmediato para comenzar a sumar.

Lunes, 27 de agosto de 2012