Crismanich ganó la medalla de oro en taekwondo y desde Londres emocionó con su humildad: "No tengo palabras para explicarlo". El correntino le agradeció a la gente en Argentina que "estuvo prendida por televisión". Y después tiró: "Ahora voy a buscar nuevas metas". Se nota que no cae...


Argentina a las patadas. Gritos en la oficina, en los bares, en las casas, gritos por un deporte casi ignoto por estas tierras, por el taekwondo. Gritos por Crismanich: el correntino ganó la única medalla de oro argentina en Londres 2012. Lo festejó todo el país. Y lo vive él: "Es un sueño para mí, no lo puedo creer", tiró tras la pelea con el español Nicolás García.

"Si me pedís que te lo explique me tengo que quedar callado, no tengo palabras... En un tiempo voy a caer", contó Sebastián agitado, cansado pero totalmente feliz tras la victoria. Y, esperando por colocarse la medalla de oro, ya trazó planes a futuro: "Tengo que buscar nuevas metas, vamos por más".

"No me puedo imaginar la alegría que deben tener, debe igualar la mía o superar. Sé que estuvieron prendidos en la televisión...", tiró Crismanich, pensando en Argentina. Esa Argentina que, por un momento, se paralizó por el taekwondo. Esa Argentina a las patadas...

Viernes, 10 de agosto de 2012