La Justicia correntina puso freno a la toma de terrenos, por lo menos de las 34 hectáreas que pertenecen a dos firmas inmobiliarias.
La guardia policial es constante en toda la zona. Hay quienes resisten desde hace unos 10 días y hablan de una “pueblada”.
Mientras algunos llevan resistiendo más de diez días en los asentamientos del barrio Pirayuí, la Justicia correntina dictó una medida de “no innovar”, para evitar se sigan sumando familias a la toma de terrenos. Informaron que el desalojo de tierras usurpadas a privados es “inminente”.
La jueza de Instrucción, Gabriela Aromí de Sommer, dictó durante la noche del martes, la medida cautelar que ordena impedir el ingreso de personas y materiales de construcción en la zona, para evitar que las familias inicien edificaciones para establecerse.
Se trata de unas 34 hectáreas, de las cuáles 24 pertenecen a la firma Urbano S.A. y entre 9 o 10 a Guaraní, según indicó a época el titular de la Fiscalía de Instrucción Nº1, Buenaventura Duarte. El funcionario judicial sostuvo que el desalojo de los terrenos privados “es inminente” y los tiempos están atados al avance del expediente con la denuncia de las empresas.
Afirmó, además, que personalmente espera actuar en un marco de tranquilidad para evitar escenas de violencia. “Estamos ante una problemática social y la gente tiene intenciones de colaborar”, aseveró.
Ayer, al ingresar a la zona de influencia, una guardia Policial vigilaba el ingreso a las 550 viviendas, primer tramo que comunica a los terrenos usurpados.
Los dispositivos de seguridad se ubicaron en el camino de tierra que nace desde la Ruta Nacional Nº12, que comprende unos 500 metros hasta llegar a los complejos habitacionales, en dos grupos integrados por dos efectivos cada uno.
Una vez en el barrio, las patrullas deambulaban en cada sector ocupado, mientras que en la zona del Puente Blanco yacía ayer en horas del mediodía una base policial con al menos 20 efectivos dispersos en el corazón de dicho asentamiento. La escena se repetía en la zona del Puente Negro, más cercano al barrio Doctor Montaña.
El jefe de la Policía, Alfredo Ojeda, se presentó cerca del mediodía en el lugar. Consultado por época si los efectivos estaban allí para preservar la integridad de los ocupantes, aclaró que su función era evitar que más “usurpadores” avanzaran en los espacios.
Reiteró que las comisarías Decimotercera y Decimocuarta, siguiendo las ordenes de las fiscalías, avanzaron en los relevamientos de identificación de personas y constatación del lugar, en tanto precisó que el desalojo se efectuará una vez que se impartan las órdenes de la Justicia.
Jueves, 12 de julio de 2012