Los vecinos, hartos de los extensas e incesantes interrupciones en el servicio eléctrico, arremeten contra los operarios cuando éstos procuran reparar las fallas. Es que en este verano retrasaron sus servicios por un conflicto salarial con el Gobierno provincial.
La reacción violenta de vecinos de varios barrios de Capital con los trabajadores de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (DPEC) quizá no sea la correcta pero es perfectamente comprensible. Y hasta lógica. Cuando la cuerda se tensa demasiado, generalmente suele cortarse. Y quienes fueron los responsables de que la misma se dilate incontrolablemente deben asumir las responsabilidades que sus actos originan.
La crisis energética que padece Corrientes tiene innumerables razones: desde la poca visión de aquellos gobernantes que no supieron obtener provecho por la construcción de Yacyretá, la desventajosa posición de la Provincia ante la privatización del transporte energético y el déficit alarmante en infraestructura local.
Al llegar el verano y el país -no sólo Corrientes-supera los récord de consumo, Argentina lo siente. Más en plena etapa de crecimiento. Por ello, quizá, los sufridos vecinos entienden y hasta “perdonan” no tener energía eléctrica en sus casas por unas horas, más allá del calor reinante.
Sin embargo, cuando la falta del vital suministro se produce en medio de un conflicto entre los trabajadores de la DPEC y el Estado provincial, la paciencia se agota. Es que los vecinos no quieren ser el “jamón del medio”, los rehenes de una protesta.
Nadie critica el reclamo salarial de los empleados de la entidad energética.
Sin embargo, llevar la protesta al extremo de perjudicar a los vecinos para obtener un rédito en el conflicto es denigrante y vergonzoso.
Quizá la tardanza en la reparación o en el reestablecimiento del servicio en muchas ocasiones no está relacionado a un hecho adrede de los trabajadores. Pero ¿quién le quita la bronca a los vecinos que deben pasar horas sin la prestación del servicio?
El calor es insoportable, los alimentos se echan a perder, los adultos mayores y los enfermos padecen un presente sinrazón, los electrodomésticos se funden por los bajones de tensión o los abruptos cortes... una postal lapidaria que colma la paciencia de usuarios que mostraron en la violencia su hartazgo (GG).
Proyectos legislativos
En la última sesión de Diputados ingresaron dos iniciativas relacionadas a la situación energética correntina. Por un lado, el radical Héctor López propicia un proyecto de Resolución que solicita al Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) y al Secretario de Energía de la Nación intervengan a fin de exigir el estricto cumplimiento de las obligaciones establecidas en el contrato de concesión de TRANSNEA SA. y de TRANSENER SA.
Por otra parte, el bloque Frente para la Victoria presentó un proyecto de ley plan de inversión en energía eléctrica como política de Estado.
Crisis energética
El diputado nacional por Corrientes Lucio Aspiazú (Unión Cívica Radical) aseguró que uno de los inconvenientes más urgentes que debe enfrentar el país es la crisis energética.
“En Argentina el problema grave es la crisis energética”, comentó el legislador curuzucuateño opositor a nivel nacional.
Lunes, 12 de marzo de 2012