El Intendente explicó que fue al lugar de los hechos para ponerse a disposición de las autoridades y colaborar. Reprochó la ausencia del Ministro de Gobierno provincial.

La respuesta del intendente capitalino Carlos “Camau” Espínola no se hizo esperar, recogió el guante arrogado por el subsecretario de Gobierno Luis Bravo. Todo en el marco del intento de motín el sábado pasado en la Unidad Penal Nº1 y por la presencia del alcalde en el lugar mientras se desarrollaban los hechos de violencia.

“Si este funcionario no salía a decir las barbaridades que dijo: nadie se hubiese enterado que yo estaba allí”, disparó Espínola y fue un poco más allá al calibrar el fuego de sus palabras. “Si hubiera estado Valdés (ministro de Gobierno) esto no hubiera pasado a mayores y se hubiera resuelto”.

La cuestión tomó el sendero político porque cuando empezó la protesta de los internos en el penal, sábado alrededor de las 20, dirigentes políticos y funcionarios que se aprestaban a disfrutar de la primera velada de la Fiesta Nacional del Chamamé, se dirigieron al lugar de conflicto.

Así, el vicegobernador a cargo del Ejecutivo, Pedro Braillard Poccard, también estuvo en la sede carcelaria. Sin embargo, el domingo a última hora de la tarde Luis Bravo envió un comunicado de prensa a los medios con duros conceptos hacia el intendente de la ciudad preguntándose qué hacía Espínola allí. “Vino a interiorizarse sobre si había muertos tras la reducción del motín”, reprodujo el parte oficial tras lo cual cargó: “En realidad no se entiende mucho qué fue a hacer allí, porque nada podía hacer, ya que no tiene jurisdicción. En todo caso, los muertos que fue a buscar, los va a encontrar en las avenidas y calles capitalinas, que todos los días son tapa de los diarios a causa de los baches abiertos sin señalizar”.

Como se observa el concepto de solidaridad en el funcionario de la cartera de Gobierno no existe para su cosmovisión de vivir en comunidad.

“Estuve allí porque tengo la obligación de hacerlo como Intendente y como ciudadano”, dijo Espínola para agregar después: “De hecho había un camión de la municipalidad a disposición por si había que reforzar la zona y dar más garantías. La preocupación que tengo por las personas involucradas tanto de familiares de un sector como otro, también los guardias de la cárcel y también de los vecinos que estaban alrededor”.

De fondo: la politización sobre el drama del sistema carcelario en Corrientes quedó alejada del foco de atención tras la polémica entre Municipio y Provincia. Una pelea que cada tanto se aviva en cualquier ámbito y espacio.


Martes, 17 de enero de 2012