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El ascensor que cayó en Las Cañitas: la causa del accidente en la que todos los expertos coinciden
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Viernes, 3 de octubre de 2025

Aseguran que el principal problema es que se subieron diez personas en un ascensor con capacidad para cuatro.
Explicaron cuáles son los mecanismos de seguridad que tienen estas cabinas y por qué no hubo una caída al vacío.


El estruendo en plena madrugada sacudió a los vecinos de Las Cañitas. Diez jóvenes de entre 18 y 22 años quedaron atrapados en un ascensor que cayó desde el séptimo piso hasta el subsuelo de un edificio en Arévalo al 2700. El accidente dejó heridos de distinta consideración, entre ellos dos chicas con fracturas en sus piernas. La pregunta que surgió de inmediato fue la misma: ¿Cómo puede pasar algo así en un edificio nuevo?

A la 1.35 del viernes, seis mujeres y tres varones bajaban de un festejo de cumpleaños en el SUM. Se subieron al ascensor, que tenía capacidad para cuatro pasajeros o 350 kilos. Sin embargo, eran 10. El viaje terminó de forma abrupta: el ascensor descendió, se frenó en el tercer piso al activarse el freno de emergencia y luego volvió a deslizarse hasta golpear contra el parachoques en el subsuelo.

Bomberos de la Ciudad trabajaron durante más de una hora para rescatarlos. Varias puertas fueron forzadas y el operativo incluyó a policías de la Comisaría 14B y once ambulancias del SAME. La mayoría sufrió golpes y politraumatismos, aunque dos jóvenes permanecían internadas por fracturas.

El edificio, de menos de un año de antigüedad, apenas tiene tres departamentos habitados. En uno de ellos vivía el dueño de la unidad donde se había celebrado el cumpleaños.

“No fue una caída libre”
Luis Salvatierra, dueño de la empresa del ascensor, explicó que el episodio no se trató de una caída libre. “Tiene capacidad para cuatro personas. Estaba claramente indicado en la cabina. Se subieron 10. Eso es mucho. No tenía sistema de peso porque no es obligatorio por normativa. Lo que ocurrió fue que, por el exceso de carga, la cabina descendió por inercia y los cables se deslizaron en la polea hasta que golpeó contra el parachoques”, señaló.

Operativo de Bomberos de la Ciudad por la caida de un ascensor con 9 jóvenes de entre 18 y 22 años..Operativo de Bomberos de la Ciudad por la caida de un ascensor con 9 jóvenes de entre 18 y 22 años..
Salvatierra recalcó que todos los mecanismos de seguridad funcionaron: “Si hubiera sido una caída libre nadie hubiese sobrevivido. Eso no pasó. El ascensor se fue deslizando, frenado por los sistemas de seguridad, y por eso las lesiones fueron leves en la mayoría de los casos”.

También cuestionó la acción de los bomberos al momento de abrir las puertas: “Los daños visibles fueron ocasionados en el rescate, de manera indebida. Yo hace 47 años que trabajo en ascensores y puedo asegurar que la seguridad funcionó como corresponde. El problema fue la sobrecarga”.

El análisis técnico
El ingeniero Marcos Stersovsky, con tres décadas de experiencia en el rubro, explicó qué ocurre en estos casos: “El ascensor no se cae. Para que eso suceda tendrían que cortarse los cables de suspensión, algo extremadamente difícil. Lo que pasó en Las Cañitas es que no pudo detenerse en planta baja por el exceso de peso y siguió bajando hasta chocar con el resorte del fondo. Eso genera una detención brusca”.

El ex miembro de la Cámara de Ascensores fue contundente: “Acá hubo negligencia de los pasajeros. El ascensor tenía un cartel con el límite: cuatro personas. Se subieron 10. El equipo es nuevo, con todos los controles. Cuando se habla de ‘caída’, en realidad se trata de que la cabina se desnivela porque el freno tarda más en actuar con esa carga extra”.

Los heridos fueron derivados politraumatizados a los hospitales Fernández, Pirovano y Rivadavia.Los heridos fueron derivados politraumatizados a los hospitales Fernández, Pirovano y Rivadavia.
El especialista también explicó que los ascensores modernos pueden incluir limitadores de carga, que impiden que arranque si se supera el peso máximo. Pero no es obligatorio que los tengan. “La única manera de evitar situaciones como esta sería con un sistema de inhibición de carga en todos los ascensores. Si no, el riesgo depende del uso correcto de los pasajeros”, apuntó.

El rol de los controles
La Agencia Gubernamental de Control (AGC) de la Ciudad confirmó que la empresa Salvatierra está registrada y que la última inspección mensual del ascensor se había realizado en tiempo y forma.

Según el organismo, todos los ascensores deben tener un código QR junto al cartel que indica la capacidad máxima, donde se puede consultar las actas de inspección. El Código de Edificación exige revisiones mensuales y un control más exhaustivo cada seis meses.

En el caso de Las Cañitas, el ascensor había sido habilitado por la AGC al momento de la inauguración del edificio y luego las inspecciones quedaron a cargo del consorcio, que contrató a la empresa conservadora.

No es obligatorio que todos los ascensores tengan un sistema inhibidor de carga. Algunos lo incorporan, con una alarma sonora o una luz que impide el arranque si se supera el peso. Pero en la mayoría de los equipos no está previsto por normativa.

Una falla que no fue tal
El ingeniero Stersovsky lo resume así: “El ascensor funcionó como tenía que funcionar. No hubo una falla mecánica ni de mantenimiento. Lo que hubo fue un mal uso. Diez personas en un ascensor de cuatro es un exceso enorme. El sistema hizo lo que pudo y se detuvo de la manera más segura dentro de ese escenario”.

Para Salvatierra, la conclusión es la misma: “Todos los sistemas estaban en condiciones. Esto fue consecuencia directa de la sobrecarga. Si los pasajeros hubieran respetado el cartel de capacidad, no estaríamos hablando de este accidente”.

Mientras los jóvenes se recuperan, el episodio abre un debate sobre la seguridad en los ascensores de edificios nuevos y el rol de los usuarios. En la Ciudad hay más de 150 mil ascensores en funcionamiento. Todos cuentan con controles periódicos. Pero, como coinciden los especialistas, los sistemas de seguridad no reemplazan a la responsabilidad de quienes los utilizan.


Viernes, 3 de octubre de 2025

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