Ibáñez y Zárate, los goles salteños; Monje, el descuento para el equipo correntino. Pasó la duodécima fecha de la Zona 4 del torneo Federal A. En el segundo tiempo fueron expulsados Pajurek e Ibáñez.
No pudo repetir. Ni siquiera logró el empate que pudo haber sido lo más justo por cómo se dio el partido, con un tiempo para cada uno. Mandiyú no mostró ese juego que venía desplegando de visitante y lo terminó pagando con una derrota ante Juventud Antoniana en el Padre Martearena de esta ciudad.
Ibáñez abrió el marcador en el primer tiempo. Monje igualó en la segunda parte y cuando parecía que todo se encaminaba a un empate, un cabezazo de Zárate selló la victoria del local.
Las necesidades de ganar de uno y otro hizo que los primeros minutos muestren a dos equipos que piensen en el arco de enfrente. Primero fue Mandiyú el que al 1’30” una buena combinación que nació en los pies de Gonzalo Ramírez, para luego el balón pasar por los pies de Julio Sena, que tocó para Denis Silisqui que llegando al límite del campo de juego metió el centro para Matías Feisztein que no pudo darle bien a la pelota y su remate se perdió por un costado del arco defendido por Diego Pave.
Mandiyú dio la primera estocada, pero inmediatamente Juventud respondió con un remate de More que Mazzón contuvo abajo.
Con el transcurrir de los minutos el equipo salteño se fue adueñando del terreno y la pelota. Mandiyú se fue replegando y no podía sostener la tenencia del balón. Y esa mayor posesión del balón se terminó transformando en gol.
Iba el minuto 14 de la primera parte, Manuel Barrios Alfonso intentó salir jugando por el sector derecho, casi en el centro de la cancha César More lo presiono y le ganó la pelota se mandó por el carril y metió el centro para la llegada de César Ibáñez que sacó un remate bajo y esquinado que dejó sin chances a Mazzón.
El gol le dio tranquilidad al local y como contrapartida obligó a Mandiyú a tener que ir en busca de una igualdad que por entonces se veía como lejana, por cómo se presentaba el partido, ya que jugaba muy lejos del arco de Pave.
El partido se jugaba como lo quería Juventud, cerrando bien las líneas atrás y buscando una salida rápida, para ello contaba con More e Ibáñez, dos punteros bien abiertos y por el centro toda la experiencia de Gustavo Balvorin, que exigía a los centrales Rodríguez y Pajurek.
Mandiyú no mostró esa versión que siempre expuso jugando de visitante, muy impreciso en los pases. No tenía quien maneje la pelota, Pavón no podía convertirse en el eje conductor del equipo; Barrios Alfonso con muchos problemas para hacer pie en el campo de juego y así Ferreira era el que debía único que intentaba cortar el accionar del local en la zona media.
Tuvieron que pasar prácticamente 38 minutos para que Mandiyú vuelva a llevar peligro al arco rival. Un pase en profundidad de Silisqui dejó mano a mano a Sena frente a Pave, pero el delantero definió por sobre horizontal. Una jugada similar, pero esta vez fue Feisztein quien habilitó a su compañero de ataque para quedar frente a Pave, pero ahora fue el uno del equipo salteño quien se quedó con el remate abajo.
Después fue Mazzón el que sostuvo la mínima diferencia, al tapar un fuerte remate de Gerardo Gómez, que le había ganado la posición a Monje.
Se fue el primer tiempo con Juventud Antoniana ganando por la mínima diferencia, pero Mandiyú en los últimos minutos comenzó a encontrar el camino como para llegar al arco rival, generándole dos situaciones claras de gol, las que tuvo a Sena como protagonista, pero el delantero en ambas ocasiones las dilapidó, primero rematando alto, y después a las manos del arquero Pave.
Para la segunda parte, Pablo Suárez dispuso el ingreso de Germán Mayenfisch en lugar de Silisqui, y “el petiso travieso” en menos de un minuto demostró que le podía cambiar la cara al equipo, un desborde entrando por la derecha lo llevaba a quedar mano a mano con Pave, pero el oportuno cruce de Antúnes le cerró el camino.
Mandiyú salió más decidido a atacar, adelantó sus líneas y ello llevó a Juventud a tener que replegarse. Pablo Suárez no esperó mucho y mandó a la cancha a Raúl Acosta y Ariel Reinero en lugar de Sena y Feisztein. Frescura en el ataque en la calurosa noche salteña.
Y el cambio de actitud que ya se vislumbró sobre el final del primer tiempo, se consolidó en la segunda parte, con un Mandiyú más decidido a ir en busca del empate. Y lo logró en el minuto 19, cuando Pavón puso un pase en profundidad para la proyección de Barrios Alfonso, que casi sobre la línea final logró meter el centro atrás que no alcanzó Reinero y la última línea de Antoniana despejó a medias, dejando el balón para que Monje saque un remate que dejó parado a Pave.
Se hacía justicia, no era el mejor partido de Mandiyú, pero por actitud, esa misma que se le vio en la victoria ante San Jorge, pudo revertir la pálida imagen de gran parte del primer tiempo.
Pero el partido no estaba cerrado, porque Juventud ante su público quería, aunque más no sea por vergüenza, ir por la victoria. A los 33 minutos, una falta de Ferreira le da un tiro libre al local, More metió el centro para que el recién ingresado Leandro Zárate de cabeza ponga nuevamente arriba en el marcador a los salteños.
Otra vez Mandiyú a remar contra la corriente. Lo tuvo Acosta pero Pave se lo tapó, después fue Ramírez el que llegó por la izquierda pero Reta lo cruzó para sacar el balón al córner.
No pudo ser, Mandiyú lo intentó pero no fue su mejor noche y lo terminó pagando con una nueva derrota. No hay mucho tiempo para el lamento, porque en pocos días lo espera Sportivo Patria, allí puede estar la revancha.
Jueves, 16 de noviembre de 2017