En el monoblock 31 de las Mil Viviendas, por calle Rafaela entre 2 de Abril y El Maestro de esta ciudad, vecinos escucharon disturbios y hasta algunos disparos. El hecho habría ocurrido en la noche del lunes cerca de las 23:30, en el interior de un consultorio médico particular.



Fuentes cercanas al caso indicaron a época que un efectivo, de apellido Vallejos, llegó hasta el consultorio de un reconocido médico del barrio a fin de “exigirle” le firme un acta de defunción de su madre, quien murió el domingo último.
Al responderle el profesional que esa tarea no podría realizarla; que la misma sólo le corresponde a quien es médico forense, Vallejos habría tomado el arma y lo apuntó a la cabeza.
“Un paciente, que estaba en la sala de espera del consultorio, salió en defensa del médico y también fue amenazado por el policía”, contó a este medio un testigo, quien prefirió resguardar su identidad porque en el barrio “todos se conocen”.
Tras el momento tenso, el uniformado habría huido a su domicilio, ubicado en el mismo monoblock.
Uno de los pacientes llamó al servicio de emergencias 911 y una patrulla llegó al lugar.
Al intentar hablar con el supuesto uniformado agresor, éste los habría recibido con disparos.
“Cualquier persona pudo haber salido herida”, dijo conmocionado un vecino. Por razón de jurisdicción intervino personal policial de la comisaría Séptima.


Sin denuncias ni exposición
policial sobre el caso
“Sabemos que no van a hacer denuncia ni el médico y mucho menos el vecino porque se conocen, y por miedo a represalias no van a acusarlo”, dijo una fuente consultada quien dejó en claro que no se trató de la primera vez que el efectivo reacciona de manera violenta ante un hecho que involucra a vecinos del barrio.
“Quedará en una de las tantas situaciones que se lo involucra al policía. Es conocido por agresiones”, apuntó.
Una voz oficial, por su parte, dijo a este medio que de no realizar denuncias se podría iniciar de oficio el caso, siempre que se logre dialogar sobre lo ocurrido con el profesional y el paciente involucrado.
“Seguramente al tomar estado público el caso se labrarán cuestiones administrativas sobre la conducta del efectivo”, agregó.

Vecinos
temerosos
Algunos testimonios de vecinos que escucharon los gritos, disparos y vieron las corridas por la zona, manifestaron a este medio que se vivieron “momentos de tensión”.
“Es lamentable tener que vivir esta situación, el médico es una buena persona, no se merecía esa amenaza. Hasta las 4 de la madrugada muchas veces atiende a los que no tenemos obra social.
No está bien que le ataquen así”, dijo María.
Otra vecina dijo, que el “policía agresor” siempre reacciona mal y que por miedo “no se lo hacen saber a sus superiores”.

Miércoles, 8 de febrero de 2017