Miércoles, 30 de diciembre de 2015

El Paraná bajó un solo centímetro, llegando a los 7,29 metros y manteniéndose por sobre el nivel de evacuación. En tanto, desde la Municipalidad señalaron que los relocalizados no podrán volver a sus casas hasta que no baje a los 7,20 metros.





Luego de la bajante del lunes, ayer el río Paraná volvió a mostrarse estacionado y con una leve diferencia (bajó un solo centímetro) llegando a los 7,29 metros, manteniéndose por encima de los 7 metros de evacuación y perjudicando a cientos de familias ribereñas de la Capital. La poca modificación del caudal hizo que se mantenga la cantidad de grupos familiares de 73, entre evacuados y autoevacuados, que vienen siendo asistidos por el Estado desde hace semanas.

En tanto, desde la Municipalidad manifestaron que continúan con los monitoreos constantes de las familias afectadas en la zona costera, no sólo por el avance del cauce fluvial sino también por los efectos negativos que generarían eventuales tormentas.

Estiman que una vez que el río Paraná baje hasta los 7,20 metros, lentamente algunos evacuados podrían regresar a sus hogares, que actualmente están colapsados por el agua.

El Paraná se mostró ayer estacionado en los 7,29 metros, por lo que no hubo cambios en la cantidad de evacuados que se registran en la ciudad: unas 73 familias están siendo asistidas en centros municipales o estatales (como las 9 familias del Caridi que se encuentran en la Escuela N° 299 del barrio Galván). De igual forma continúan con el monitoreo de las zonas ribereñas.
Asimismo, ayer la Municipalidad debió asistir rápidamente a un vecino de la zona de La Tosquera -ubicada en el barrio Río Paraná- que padecía problemas respiratorios y se negaba a salir de su casa que se encuentra asediada por el agua. Los agentes de la Dirección de Acciones Directas y personal médico lograron asistirlo y retirarlo de su hogar para posteriormente trasladarlo al Hospital Escuela, donde recibió atención médica.

En tanto, otros de los barrios más comprometidos donde siguieron haciendo entregas de alimentos y asistencia fueron Quinta Ferré, Punta Taitalo y Cichero.

Mientras, se espera que una vez que el río Paraná baje hasta los 7,20 metros las familias puedan regresar a sus hogares, aunque no todos los afectados lo harían al mismo tiempo.

Miércoles, 30 de diciembre de 2015