Los escombros cayeron sobre la calle Buenos Aires desde unos 10 metros de altura. Afortunadamente no se registraron heridos. Desde Obras Públicas de la Provincia realizaron una inspección ocular y levantaron un vallado para evitar que los transeúntes circulen por la vereda.
Alrededor de las 8 de ayer, parte de la mampostería de una de las cornisas de la iglesia Nuestra Señora de la Merced se desprendió y los escombros cayeron sobre la vereda de la calle Buenos Aires desde unos diez metros de altura.
Afortunadamente, debido al receso invernal escolar y administrativo, el número de transeúntes era escaso a esa hora y no hubo que lamentar heridos.
Durante el transcurso de la mañana, inspectores de la Dirección de Planificación y Obras de la Provincia realizaron una inspección ocular del desprendimiento, para determinar qué acciones serían necesarias.
“Por el momento no podemos determinar la gravedad de la situación, porque sólo pudimos realizar una inspección ocular y es un sitio bastante alto, a 10 metros de altura, de no fácil acceso. Para llegar hasta ahí y observar con mayor cuidado hace falta colocar un andamio y otra serie de medidas”, indicó a El Litoral José Luis Matzner, director de Planificación y Obras.
Matzner explicó que debido a la feria administrativa, las dependencias gubernamentales se encuentran con poco personal, lo que dificulta un arreglo en los próximos días.
“Lo antes posible, revisaremos la zona más de cerca, observaremos si hay más partes flojas, y procederemos al arreglo que haga falta”, agregó el funcionario.
Momentáneamente, desde la dirección a cargo de Matzner realizaron medidas tendientes a la seguridad de los transeúntes. A partir de la inspección ocular, se calculó el área posiblemente afectada y se colocó un vallado sobre la vereda, por calle Buenos Aires, para prevenir que quienes transiten caminando por el lugar puedan resultar lesionados por algún otro desprendimiento.
“Por lo que pudimos observar, la estructura edilicia no corre peligro. El único inconveniente son las personas que transitan, por eso vamos a colocar el vallado”, señaló Matzner.
Multa
Según informó el padre Raúl Danielli, cura párroco de la Iglesia Nuestra Señora de la Merced, la caída de parte de la mampostería del templo les significó una multa, labrada por la Municipalidad.
“La caída de los escombros fue a las 8, y como para el mediodía todavía no se había puesto ningún vallado o delimitado la zona para que no se crucen los peatones, desde la Municipalidad nos labraron una multa”, contó el cura párroco a El Litoral.
Jueves, 16 de julio de 2015
