Para la querella los jueces que liberaron al sacerdote no pueden ser los mismos que lo juzguen en el debate que se inicia el 9 de diciembre. Pedirán que se constituya otro Tribunal. Ayer a través de los medios nacionales se criticó al obispo Ricardo Faifer, quien respondió a través de un comunicado de prensa y volvió a aclarar que se trató de un acto de misericordia.




Los medios de comunicación nacional recién ayer se hicieron eco de la causa donde se investiga el abuso de un joven en una capilla de Esquina. El acusado es el sacerdote Domingo Pacheco, quien la semana pasada recuperó la libertad luego de que el Obispado de Goya afrontara el pago de la caución impuesta por la Jus-ticia. La actuación del obispo Ricardo Faifer generó polémica y hasta cuestionaron su decisión. En un comunicado de prensa monseñor volvió a aclarar que se trató de un acto de misericordia.
“A la comunidad católica de Esquina y a las personas de buena voluntad.
Ante las distintas versiones periodísticas del caso de referencia, es oportuno in-formar y aclarar: que la Constitución Nacional y Pac-tos Internacionales celebrados por nuestro país, garantizan la libertad de un detenido, en razón del principio de presunción de inocencia, habiendo transcurrido más de dos años en prisión sin sentencia. Principio que debe aplicarse en todo caso, en razón de la defensa de los Derechos Humanos. Por esta razón, los jueces competentes concedieron el cese de prisión al Padre Domingo Jesús Pacheco, ante el pedido de su abogado particular.
Que el Obispado de Goya dio en caución ante el requerimiento judicial, un vehículo, a fin de que el Padre Do-mingo, que resulta imputado en una causa penal, goce de libertad hasta el juicio oral que se celebrará los días 9 al 11 de diciembre del presente año. Dicha caución tiene por finalidad garantizar la comparencia del imputado a la audiencia de debate y quedará sin efecto alguno, una vez que se realice el mismo.
La garantía prestada por el Obispado no implica estar a favor del imputado, y es un acto puntual de misericordia. La culpabilidad o responsabilidad del imputado, la tendrá que determinar la Justicia. Es esto lo que la so-ciedad y la Iglesia esperan.
Una vez más recordamos lo que dijo Jesús: ‘La verdad los hará libres’ (Jn. 8,32)”, finaliza el comunicado.
En medio del escándalo la querella recusó al Tribunal Oral Penal de Goya. En-tiende que los mismos jueces que le dieron el beneficio de la libertad, no pueden ser quien lo juzgue.
En tanto insistieron que se revoque la excarcelación otorgada al cura imputado porque no cumple con los requisitos pautados. Había fijado domicilio en la capital correntina, pero en los últimos días se lo vio por las calles de Esquina. Existe el temor de que pueda amedrentar a la víctima o a su familia.
“Nos ha costado mucho entender, tanto a los familiares de la víctima como a mí personalmente, la postura que adoptó la Iglesia, en este caso, el Arzobispado de la ciudad de Goya, que salió como garante, teniendo que presentar una caución real y una personal”, comentó la doctora Verónica Verges, abogada de Osvaldo Ramí-rez.
“Lo que podemos ver a través de la actitud que ha to-mado el Arzobispado es que manifiesta un claro apoyo al señor Pacheco. Tanto nosotros, como la opinión pública en general, lo ha tomado como un abierto apoyo, un acompañamiento de parte del obispo a este tipo de cuestiones, lo cual nos resulta realmente llamativo y un agravio a mi representado como a su familia”, expresó la letrada.

Martes, 19 de noviembre de 2013