La fiscal Paula Asaro y la querella del padre de Angeles Rawson pidieron que se rechace el tercer planteo de nulidad de la defensa del detenido Jorge Mangeri. El juez Ríos tiene tres días para resolver este nuevo planteo, aunque puede prorrogarlos. Tanto la fiscal como el abogado querellante Pablo Lanusse presentaron esta mañana sus vistas a la nulidad presentada por la defensa, solicitándole al juez de la causa, Javier Ríos, que sea rechazada y con el pago de costas para los abogados del portero, Miguel Angel Pierri y Marcelo Biondi. Voceros judiciales indicaron a Télam que ahora el juez Ríos tiene tres días -aunque puede prorrogarlos- para resolver este nuevo planteo de la defensa, que es la tercera nulidad presentada en la causa.
LA DEFENSA DE MANGERI
Pierri y Biondi volvieron a cuestionar los estudios de ADN que incriminaron al portero del edificio de Ravignani 2360.
En esa presentación, los defensores afirmaron que los hisopados de las uñas de Angeles se procesaron en los laboratorios el mismo día que la sangre del imputado y que, durante ese procedimiento, pudo existir una contaminación y por ello se halló el perfil genético del portero en tres uñas de la víctima.
Las otras dos nulidades que la defensa presentó en el expediente -una referida a la cadena de custodia del ADN y la otra pidiendo la anulación de la causa por la testimonial que terminó con la autoincriminación del portero-, fueron rechazadas tanto por el juez de la causa como por la Sala VI de la Cámara del Crimen.
En tanto, el juez Ríos esperaba que el Cuerpo Médico Forense le informe el resultado de los estudios histopatológicos de las 55 muestras de tejidos y huesos que luego de la exhumación del cadáver fueron enviados al laboratorio.
Entre otras cuestiones, esos estudios deben confirmar si las lesiones genitales y paragenitales que presentaba la víctima son vitales o postmortem y, por lo tanto, si son compatibles con un ataque sexual, como opinó la Junta Médica.
Si el abuso sexual es confirmado, el juez Ríos, al indagar a Mangeri por quinta vez -como ordenó la Cámara del Crimen-, podría volver a imputarle un homicidio calificado, esta vez, "críminis causa", es decir, cuando se mata para ocultar otro delito, en este caso el ataque sexual, y lograr la impunidad, tal como ya solicitó la querella en el expediente.
El abogado Lanusse también planteó hace dos semanas que Mangeri cometió el crimen "en un contexto de violencia de género" y, apelando a la Ley 26.791 que incorporó la figura del "femicidio", pidió que se lo impute e indague por ese delito que se castiga con prisión perpetua.
EL ASESINATO
Angeles "Mumi" Rawson (16) desapareció el lunes 10 de junio cuando regresaba de una clase de educación física hacia el departamento de la planta baja "A" del edificio de Ravignani 2360, en el barrio porteño de Palermo donde vivía con su madre, su padrastro y sus hermanos.
Al día siguiente, su cadáver fue hallado en el predio de la CEAMSE de la localidad bonaerense de José León Suárez, y por el crimen fue detenido Mangeri, quien era el portero del mencionado edificio y se autoincriminó cuando declaraba ante la fiscal.
Mangeri nunca confesó formalmente el hecho en las cuatro indagatorias que tuvo a lo largo de la causa. La última vez, cuando él pidió declarar ante el juez Ríos pero no contestó preguntas, dijo que era inocente, que en la fiscalía se había hecho cargo del crimen porque lo "apretó" la Policía Federal y sugirió que la causa estaba "armada".
Según la última Junta Médica, Angeles murió entre las 11 y las 17 de aquel lunes, sofocada y estrangulada por su asesino en una maniobra que no duró más de cinco minutos, luego de ser golpeada y antes de que su cuerpo ingresara a la compactadora de basura.
Martes, 24 de septiembre de 2013