Pese a las recomendaciones, el número de tests positivos se mantiene cada noche, en especial los fines de semana. Así, la prevención es la única herramienta eficiente para mejorar el problema vial.
Teniendo en cuenta la cantidad de conductores alcoholizados que son detectados en los distintos operativos de la Dirección de Tránsito, los funcionarios del área decidieron incrementar los operativos durante todas las jornadas y en las calles y avenidas con mayor afluencia de vehículos. El trabajo responde a una firme premisa de lograr que una disminución en la cantidad de siniestros viales de la ciudad.
El exceso en la ingesta de alcohol es uno de los mayores inconvenientes en la crisis vial que atraviesa Corrientes. Los inspectores reconocen que lamentablemente de cada cinco conductores que pasan por el test, al menos dos o tres tienen algún porcentaje de alcohol en sangre.
"Se trata de algo que a nosotros nos preocupa mucho porque vemos todos días en qué termina. Los choques, gente que se duerme manejando o que atropella a otra que se le cruzó por el camino. Es por el peligro al que se expone cada uno, pero más por lo que se expone a los demás que nuestra lucha diaria es contra el consumo de alcohol antes de manejar", explicó a EL LIBERTADOR uno de los miembros del cuerpo municipal.
UTILIDAD
Es en este punto es donde los alcoholímetros resultan de suma importancia porque ayudan a detectar a las personas que están ebrias al volante. "Que el test de positivo es motivo de retiro de la vía pública del vehículo, ya sea moto o auto. Trabajamos con la prevención, es la única herramienta que poseemos para evitar que ocurra algún siniestro", manifestó en distintas oportunidades el director General del área, Pedro Saipe.
En este sentido y con la idea de mejorar los índices, el jefe del cuerpo de inspectores, Walter Parisi, presentó durante el año anterior un proyecto de ley para modificar una de las ordenanzas que rigen el tránsito de la ciudad. La propuesta de Tolerancia Cero para los Alcoholímetros fue muy bien vista por los ediles capitalinos, pero no fue tratada porque cerró el período de sesiones ordinarias de 2012. En tanto, los conductores locales siguen contando con un margen del 0.50 para los que van en auto, y de 0.20 para los que van en motos.
"Seguimos con esa pequeña cantidad que se tolera y es eso precisamente lo que debemos quitar. De otra forma las personas no van a tomar conciencia. Por desgracia somos hijos del rigor, tienen que prohibir las cosas y ponerles sanciones para que hagamos caso, aunque se trate como ahora, de algo por nuestra propia seguridad y la de todos los demás", puntualizó Parissi en diálogo con este medio.
El refuerzo de los trabajos es entonces la única alternativa posible para paliar la situación de descontrol en las noches, principalmente en el caso de los jóvenes. En este punto aclararon que los esfuerzos se concentran en los lugares considerados críticos durante las noches.
Se trata de los sitios con mayor aglomeración de personas, en especial por la presencia de locales bailables, como las avenidas costanera General San Martín y Juan Pablo II, además de la zonas del parque Mitre.
"Lo malo es la falta de contención de los padres con sus hijos. Pareciera que no les hablan ni les dicen que se cuiden, por eso tenemos que trabajar el doble y hacer conciencia con ellos en cada operativo", finalizó Parissi.
Martes, 15 de enero de 2013