El entrenador de la Verdeamarela afirmó que dos seleccionados como los de Argentina y Brasil no pueden sufrir por estos inconvenientes y aseguró estar "decepcionado y con tristeza".
El entrenador del seleccionado brasileño, Mano Menezes, afirmó que su equipo quería jugar y por eso esperó "un tiempo prudencial" antes que se suspendiera por falta de iluminación en el estadio Bicentenario de Resistencia la revancha ante Argentina, por el Superclásico de las Américas.
"Nosotros queríamos jugar y esperamos el tiempo prudencial. Ahora las que definen si se vuelve a jugar son las asociaciones", expresó el técnico. Y agregó: "Estábamos preparados adecuadamente para jugar fútbol. Estamos decepcionados y con tristeza por no haber podido jugar".
"Argentina y Brasil no deben pasar por una situación como ésta. Es una decepción bastante grande de estos profesionales. Ahora debemos respetar a los clubes brasileños que deben jugar el sábado y por eso nos debemos ir ", sentenció.
Jueves, 4 de octubre de 2012