La Presidenta inauguró la "Cátedra Argentina" y aseguró que habla muchísimo con la prensa del país, pero aclaró "En mi país no hay periodismo independiente". Los alumnos consultaron sobre la inflación, su relación con el periodismo, el FMI entre otros aspectos.
La presidente de la Nación al inaugurar la "Cátedra Argentina" en la Universidad de Georgetown, defendió las estadísticas del Indec y criticó las advertencias que el Fondo Monetario Internacional lanzó en los últimos días. Hasta aprovechó para poner en duda los números de la economía del gobierno del presidente Barack Obama.
"Hay un ensañamiento como que la Argentina es el mal alumno, un mal ejemplo para el FMI", consideró la mandataria, que aseguró que no tiene "animosidad" con la institución, sino "postura crítica".
Al responder sobre las estadísticas argentinas, puso en duda los números de Estados Unidos con una pregunta retórica a los alumnos: "¿Realmente ustedes creen que la inflación es de un dos por ciento en su país?". Y al referirse nuevamente a la Argentina, replicó: "El país estaría por los aires si la inflación fuera del 24 por ciento"
Cristina consideró que existe cierta "similitud" entre lo que pasó en la Argentina en los momentos previos a la crisis del 2001, y lo que hoy sucede en la eurozona.
"Desgraciadamente para los hermanos europeos, veo muy parecido lo que hoy sucede en la eurozona con lo que sucedió en Argentina, cuando implosionó la crisis del 2001", dijo.
Agregó que "si uno pudiera mirar crónicas de esa época que aparecían en los diarios, parecía que estaba todo bien", e ironizó que "cualquier similitud con lo que se está viendo en la eurozona con los rescates es mera coincidencia".
“En mi país no hay prensa independiente y objetiva”
Gabin, un joven oriundo de Michigan que cursaba sus estudios en Asuntos Latinoamericanos en esa institución, la consultó: “¿Por qué nosotros, los estudiantes, tenemos la oportunidad de hablar contigo cuando usted no ha hablado con la prensa en la Argentina por muchos años?“.
"Es mentira", respondió rápidamente la Presidente, quien defendió la relación que tiene con la prensa y aseguró que "habla muchísimo" con periodistas. Según contó, dialoga con periodistas acreditados en la Casa Rosada y responde al ser consultada cuando hace actos.
"Lo que pasa es que en Argentina no hablar con la prensa es no decir lo que ellos quieren escuchar", indicó. Cuando no tienen la respuesta que esperan, "empiezan a gritar" o "pegan un portazo", aseguró, y recordó un episodio que ocurrió en una conferencia de uno de sus ministros.
La mandataria cargó contra los periodistas que creen que "es más importante el entrevistador que el entrevistado" y que creen que son independientes. "Son independientes de los Reyes de España", ironizó. "En mi país no hay prensa independiente y objetiva", afirmó.
"No debe haber habido una presidenta más descalificada, insultada y más agraviada" por la prensa, dijo en referencia a sí misma. Y agregó que "sin embargo es la que envió el proyecto al Congreso para eliminar los delitos de calumnias e injurias para periodistas".
Miércoles, 26 de septiembre de 2012