Murray se metió en la final de Wimbledon y terminó con una racha de 76 años sin finalistas británicos, luego de derrotar a Tsonga por 6-4, 6-3, 3-6 y 7-5. El escocés no la tiene fácil: va con Federer, que quiere volver a ser el N°1.
En la segunda semifinal de Wimbledon, el escocés Andy Murray fue contra las estadísticas y desplegó su mejor tenis para vencer al francés Tsonga por sexta vez en los últimos siete enfrentamientos, y convertirse en el primer finalista británico del Grand Slam luego de 76 años. Con la ductilidad que lo caracteriza para adaptarse a cualquier tipo de superficie, Murray jugó un gran partido y se metió directo en la final, donde se las verá con Roger Federer que intenta recuperar el primer lugar en el ranking.
Eficaz y contundente, Andy demostró el buen momento tenístico por el que atraviesa, estampando un 6-4, 6-3 en el comienzo. Y Aunque Tsonga levantó su nivel en el tercer set, logrando un 3-6, el británico no lo dejó llegar al quinto y lo definió en el cuarto por 7-5. De esta manera, se convirtió en el finalista de Wimbledon y cumplió con la presión de la localía, que le exigía romper con la maldición desde que Fred Perry ganara tres veces el certamen (1934, 1935 y 1936).
En búsqueda de su primer Grand Slam, Murray no la tiene sencilla, porque en la final estará Roger Federer, que atraviesa un gran momento y viene de vencer a Novak Djokovic por 6-3, 3-6, 6-4 y 6-3. El suizo buscará su séptimo Wimbledon, para igualar la línea máxima de Sampras y Renshaw, y si lo logra, volverá a ser el N°1 del mundo, desplazando a Novak. Una final con mucho en juego...
Viernes, 6 de julio de 2012