Durante su gestión, los servicios de inteligencia sospechaban de la presencia de Hezbollah en la Triple Frontera. También advirtieron de un ataque de Bin Laden, tres años antes del 11-S.Documentos desclasificados el lunes por la Ley de Acceso a la Información demostraron que durante el gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002) existió la sospecha de que grupos terroristas podían atentar en territorio brasileño.Los informes, recogidos por el diario Folha de Sao Paulo, contradicen la postura oficial que se tuvo en esos años, la cual negó siempre tener pruebas de actividades terroristas en la región.Un informe realizado en 1999 por agentes de la Secretaría de Asuntos Estratégicos (SAE) menciona una supuesta reestructuración de Hezbollah. Líderes del grupo libanés y sus células en la Triple Frontera (Brasil, Paraguay y Argentina) se reunieron para ello en Ciudad del Este.
"Brasil y Paraguay han adquirido una importancia especial, sirvieron de base para los combatientes que eligieron los objetivos, especialmente en Argentina -donde existieron dos ataques- y Uruguay", dice el documento. Tres años antes, en 1996, la SAE indicó que las bases de Hezbollah estaban en al menos cinco ciudades: Foz de Iguazú y Curitiba, Paraná, Ponta Pora, Tabatinga y San Pablo.
Los informes también analizaron la posibilidad, en 1998, de que Osama Bin Laden atacara a Brasil o a otro país de América del Sur.
Otros textos registran pruebas sobre el accionar de los guerrilleros de las FARC en territorio brasileño.
Miércoles, 4 de julio de 2012