Las paredes habían sido levantadas con ladrillos de canto y una de ellas presentaba “una enorme rajadura en sus laterales”, según reconoció el propio dueño.
Algunos hasta especularon que el fuerte sonido de los bafles aflojaron la estructura, aunque no es oficial.
Tan solo un herido leve y un gran susto provocó ayer la caída del techo de una vivienda, mientras dentro de ella, varias personas celebraban, el Día del Padre. Hasta ayer por la tarde bomberos trabajaban removiendo los escombros para determinar qué pudo haber sucedido, informaron voceros oficiales.
Fue cerca de las 15, cuando bomberos, policías y el servicio de Emergencias Médicas fueron puestos en alerta por un derrumbe con heridos y posibles atrapados.
Esta vez el incidente fue doméstico, en una vivienda ubicada por Pasaje Barranqueras entre las calles Hernán Cortéz y Colón, del barrio Juan de Vera.
Cuando las unidades de rescate llegaron al lugar se encontraron con un cuadro dantesco. La parcialidad de un techo de chapas de zinc y las paredes de una precaria vivienda, se habían venido abajo dejando atrapado por segundos Eduardo Barrios, uno de sus propietarios de la finca, que pudo salir gracias a la reacción de sus familiares y amigos, que al parecer estaban festejando el Día del Padre en el lugar.
Los motivos del incidente hasta anoche eran poco claro y todavía estaban en proceso de investigación.
Pero, para sumar a la investigación el propio Barrios habría relatado que las paredes estaban realizadas con ladrillos colocados de canto, con lo cual ya se trataba de una estructura débil.
A esto, le sumó que una de las paredes laterales tenía una enorme rajadura y que “se había dejado estar para arreglarla, aún a sabiendas de que se podía venir abajo”, explicaron a época, fuentes del caso.
Algunos de los pesquisas indicaban que posiblemente la estructura cedió justamente por alguna mala construcción, otros por sobre-carga y otros, hasta incluso elucubraron que la estridencia del sonido de los gigantescos bafles que había dentro de la vivienda, pudieron haber debilitado la estructura y esto ayudó al desplome de la misma sobre quienes se hallaban dentro. Todos son datos especulativos, hasta tanto los especialistas brinden el informe real de la situación.
Lo cierto, es que la caída del techo y las paredes dejó con heridas de consideración pero no de gravedad a Barrios, que según algunos de sus familiares comentaron a época en el lugar de los hechos, debió soportar la caída de las paredes y las chapas sobre sus espaldas y algunos ladrillos en sus piernas y hasta en la cabeza, pero jamás perdió el conocimiento y pudo ser rescatado.
Fuentes oficiales confirmaron a este medio, que la estructura comprometida en el derrumbe, pertenecían a la cocina y a una de las habitaciones de la precaria vivienda.
Tras el incidente Barrios y algunos de quienes lo acompañaron debieron salir hasta el patio trasero de la casa, desde donde observaban cómo quedó la vivienda y como pudieron salir con vida de aquel lugar.
La policía confirmó que efectivos del cuartel central de Bomberos de la fuerza provincial, así como también Bomberos Voluntarios, varias patrullas y una ambulancia trabajaron en el terreno, aunque el único herido fue atendido en el lugar y prefirió no ser hospitalizado, teniendo en cuenta lo leve de sus lesiones.
Lunes, 18 de junio de 2012