Los narcotraficantes, con el fin de evitar ser descubiertos por perros detectores, colocaron la sustancia de limpieza encima de cada envoltorio. Hay un hombre detenido.
Algo más de 400 kilos del estupefaciente estaban escondidos en dos vehículos y en un terreno baldío. Los narcotraficantes, con el fin de evitar ser descubiertos por perros detectores, colocaron la sustancia de limpieza encima de cada envoltorio. Hay un hombre detenido.
Poco más de 400 kilos de marihuana, una camioneta y un automóvil importado secuestrados, además de un hombre detenido, fue el saldo de una serie de procedimientos realizados en la ciudad de Corrientes por Gendarmería Nacional Argentina.
Personal del grupo de Investigaciones dependiente de la Agrupación Regional III halló los vehículos cargados con decenas de paquetes conteniendo la sustancia alucinógena, uno adentro de un estacionamiento privado y otro en un tinglado.
Una pesquisa, en la que también trabaja el Juzgado Federal, posibilitó a los gendarmes establecer los dos sitios donde una banda de malvivientes escondió el cargamento.
De acuerdo a fuentes oficiales, ambos domicilios allanados el jueves en presencia de testigos están ubicados “dentro de las cuatro avenidas” que demarcan el casco céntrico de la ciudad, lugares que por razones de investigación no fueron mencionados con exactitud.
En uno de esos puntos, precisamente un estacionamiento privado, ubicaron un automóvil Toyota Corolla blanco de vidrios polarizados en el que había 90 kilos distribuidos en envoltorios colocados debajo del parachoques trasero, detrás de asientos y otros recovecos.
En simultáneo, en otra parte de la ciudad, requisaron una camioneta Fiat Saveiro blanca y decomisaron 110 kilos de igual sustancia, en envoltorios dispuestos en diferentes partes, principalmente en denominados “doble fondo” de la cajuela.
Los paquetes, a su vez recubiertos con bolsas de polietileno con jabón en polvo, estaban apilados sin que a simple vista pudieran ser notados.
La banda de maleantes puso la sustancia de limpieza con la finalidad de “tapar” el olor característico de la marihuana y dificultar que los canes detectores de narcóticos pudieran dejarlos en evidencia en algún puesto de control caminero.
Mientras ocurría el allanamiento al tinglado los gendarmes revisaron también un terreno baldío lindante, donde había más bolsas con picadura de marihuana por un peso total de 210 kilos.
Para dar con estos cargamentos los efectivos elaboraron un operativo que demandó varias horas de seguimientos, vigilancia encubierta y cruce de datos entre distintos grupos de trabajo.
Lo incautado por la fuerza de seguridad tiene un valor en pesos de 1 millón 500 mil pesos estimativamente. Esto demuestra a las claras las abultadas ganancias que obtienen los delincuentes abocados a este tipo de acciones.
Desde la Agrupación III informaron ayer a época que un hombre, oriundo de Corrientes (cuyos datos personales lo mantienen en reserva) quedó vinculado al delito y actualmente se halla en calidad de detenido e incomunicado.
Por disposición del Juzgado Federal los vehículos, la marihuana y otros elementos encontrados en los procedimientos quedaron secuestrados.
Se presume que el estupefaciente fue traído a la Argentina desde la República de Paraguay por una aceitada organización criminal que contaría con una cantidad indeterminada de integrantes de uno y otro país.
Sábado, 9 de junio de 2012