Una familia decidió salir por unas horas de paseo. Fue el domingo en horas de la tarde. Cuando regresaron, cerca de las 18:50 la puerta de acceso al inmueble que habitan estaba abierta y la cerradura destruida.




Lo que fue una tarde de disfrute familiar terminó con un trago amargo. Delincuentes aprovecharon la ausencia de los moradores para cometer el delito.
Al llegar a la casa, avisaron al servicio de Emergencias 911 que fueron “visitados” por ladrones. La familia permaneció en la vereda por miedo a que los malvivientes estuvieran aún en el interior.
Los uniformados acudieron de inmediato y al ingresar a la propiedad encontraron algunos elementos tirados en el suelo, pero notaron el faltante de otros objetos de valor.
Fue así que la familia denunció la sustracción de un monitor de 22 pulgadas, una netbook, una cámara digital, un televisor plasma de 49 pulgadas y la suma de 2.300 pesos que estaban ocultos en un cajón.
Uniformados de peritos dactilógrafos realizaron su trabajo mientras en la comisaría de la jurisdicción se iniciaron las investigaciones del hecho.
Vecinos en alerta
Si bien en la cuadra entre los vecinos tratan de ayudarse y estar alertas por la inseguridad, ese domingo, en el cual las condiciones climáticas fueron poco agradables, lluvia y frío, no hubo quien pudiera darse cuenta del hecho.
Se espera que las cámaras de seguridad de unos comercios cercanos puedan aportar algún dato para identificar a los autores.
“Está en etapa de investigación el robo. Hubo destrucción de algunos objetos y revolvieron las pertenencias. La denuncia fue radicada en la comisaría Segunda”, apuntó una voz oficial a época.
Por cuestiones de seguridad se resguarda la dirección exacta e identidad de la familia damnificada.

Miércoles, 5 de septiembre de 2018