Consideran que hay trabajadores que no concurren a las oficinas. Además dieron de baja a las designaciones de tres funcionarios del FPV relacionados con Camau Espínola, entre ellos el hermano de un diputado provincial.
La Dirección Nacional de Migraciones removió a Carlos Ódena de la Delegación Chaco-Corrientes y cuatro funcionarios más, que estarían involucrados en una causa penal por el ingreso ilegal y otorgamiento fraudulento de ciudadanía argentina a ciudadanos chinos.
Si bien el ahora exdirector de la delegación norteña de Migraciones explicó que había renunciado al cargo por presiones del nuevo Gobierno nacional, lo cierto es que el miércoles por la mañana llegó a Corrientes el director de Sumarios de la cartera, Milton Guillermo Tolosa, para notificar a Carlos Ódena, Walter Zuberbuler, Carolina Polo y Carlos Mórtola del despido. Todos serían parte de la causa presentada en Juzgado Federal Nº 1 a cargo del juez Carlos Soto Dávila, por “Infracción a la Ley 25871, Asociación Ilícita, Abuso de Autoridad y Violación de Deberes de Funcionario Público (Art. 248), Cohecho Activo, Aceptación de Dádiva, Exacciones Ilegales, Concusión y Falsificación Documentos Públicos”.
Asimismo desde la delegación adelantaron que se iniciará un control de la grilla de empleados, debido a que hay un gran número de personas que figuran y no se presentan a trabajar. Evidentemente, esto sería una constante de la finalizada gestión kirchnerista en las dependencias nacionales. “En la capital figuran 30 empleados, pero son solo 10 los que trabajan”, dijo una alta fuente relacionada con Tolosa.
Mentiras para desviar la atención
La estrategia de Ódena de tratar de embarrar la cancha manifestando que él no sería cómplice del despido de compañeros y que por ello renuncia, tiene por fin maquillar el escándalo que salió a la luz en noviembre de 2014. En el expediente se denuncia que Ódena y su séquito habrían instalado un negocio dentro de la Delegación de Migraciones, supuestamente relacionado con la entrada al país de ciudadanos chinos, a quienes se les habría cobrado un canon para otorgarles la ciudadanía argentina. Este incluía un acuerdo nupcial con un natural del país para que la nacionalidad sea formalmente constituida. Esta acción ilegal se habría iniciado con un monto de 15.000 pesos, pero hasta momentos previos a la denuncia, el valor de la gestión habría alcanzado los 30.000 dólares.
Asimismo, los casamientos se habrían realizado en delegaciones del Registro Civil del interior, a fin de no levantar sospechas. Si uno lo piensa fríamente, el negocio de trata y tráfico de personas contemplaba todos los detalles.
El escándalo había sacudido al Ministerio del Interior y Transporte de la Nación, área de la cual depende esta dirección. Si bien el entonces ministro Florencio Randazzo evitó hablar del tema, más allá de que tomó trascendencia federal, tras un pedido de informe al funcionario en la Cámara baja de la Nación, este acusó el golpe. Inmediatamente mandaron una auditoría y corrieron a Ódena del manejo real de la delegación.
Desde noviembre hasta el miércoles, que le llegó el despido Ódena, fue un cartón pintando en la delegación. Solo cumplía horarios y no tenía manejo de nada. Una interventora era quien tomaba las decisiones.
Perfil de los despedidos
Carlos Ódena es un militante del Partido Justicialista (PJ), que apareció en escena de la mano del actual intendente de la Capital, Fabián Ríos. Fue el chofer del hoy secretario de Medioambiente de la Municipalidad, Félix Pacayut, cuando este era titular de Migraciones. Tras la victoria de Ríos, Pacayut fue al esquema municipal y Ódena tomó su lugar. Ahora dicen volvería a refugiarse en el esquema municipal.
Walter Zuberbuler era apoderado de Nueva Dirigencia y junto al concejal goyano Ariel Pereyra, abandonaron Proyecto Corrientes para pasarse a las filas del Frente para la Victoria. En ese momento, Zuberbuler llegó a Migraciones, en un acuerdo con Carlos Mauricio Camau Espínola y palanqueado por el exmedallista olímpico.
Carlos Mórtola también se encuentra ligado al Frente para la Victoria ya que es hermano del diputado provincial bellavistense, José Mórtola, integrante de la bancada kirchnerista de ala dura.
Carolina Polo era colaboradora de Ódena y militante del espacio político del ahora exjefe de la Delegación.
Causa dormida
El notificador de los despidos y también el denunciante ante la justicia federal fue Tolosa, quien también aprovechó su paso por la capital correntina para tantear el avance de la causa.
El funcionario nacional se habría encontrado con la novedad de que la misma estaría planchada. Por ello buscarán que el juez Soto Dávila comience a realizar las actuaciones pertinentes, a fin de esclarecer el caso y que los responsables tengan el castigo correspondiente.
Viernes, 15 de enero de 2016