Los rodados están siendo llevados a los galpones en Santa Catalina. La empresa que los compactará aún no llega a Corrientes.
Los números siguen creciendo en lo que respecta a vehículos que serán compactados y todo parece indicar que la Comuna capitalina apunta más a la compactación que al remate. Las dos ordenanzas rigen desde el año pasado y persiguen el mismo fin, disminuir la cantidad de vehículos que se encuentran en los cuatro galpones de depósitos con los que cuenta el Municipio. La información oficial por parte del área de Transporte municipal que lleva a cabo la iniciativa de la compactación, remarca que hasta el momento son 550 las motos de distintas cilindradas que ya están siendo preparadas para ser reducidas a chatarra, mientras que hay entre 75 y 90 vehículos de distinto porte que también se encuentran dentro de la primera tanda. En contacto con este medio, fuentes municipales informaron que se están llevando adelante todos los pasos previos a la compactación propiamente dicha, tal y como marca el ley de medio ambiente. Primero se cumplió con los pasos administrativos de envío de intimaciones a los titulares de los vehículos que tenían más de seis meses de secuestro. Según se pudo saber algunas personas se acercaron para llevarse las unidades y pagar la multa que pesaba, mientras que otros, debido a los costos de las multas que pesan sobre los mismos o bien por no poder presentar todos los papeles de compra, no lo hicieron y las unidades fueron separadas para el desarme. El proceso es largo porque se trata de bienes de alto valor pero que en su mayoría han sido abandonados por sus dueños hace muchos años, explicaron las fuentes consultadas. Ahora el Municipio ingresa a la fase previa de compactación en la que se procede al desarme de las partes contaminantes de cada moto, auto, camión o camioneta que se encuentran listas. En tal sentido se pudo saber que desde hace algunos días, se trabaja sobre cada vehículo sacando las baterías y todos los líquidos que pudieran tener como ser aceite, nafta y otros. Todo se debe guardar por separado y luego una vez que la empresa lo compacte el resto de los elementos son entregados de forma separada tal como dicta la ley, insistieron desde el área con competencia en el proceso. Según se pudo saber además de motos y autos que desde hace tiempo han sido olvidados por sus dueños en los depósitos comunales, la partida también está conformada por una importante cantidad de vehículos abandonados en las calles de la ciudad. Hemos tenido muy buena aceptación por parte de las personas que fueron intimadas por tener rodados en las calles, en su mayoría accedieron sin problemas, dijo Walter Sotelo, referente del área. También la chatarra municipal será parte del lote a compactarse. En ese sentido aseguraron que varios vehículos en desuso que formaron parte del patrimonio comunal serán reducidos en pocas semanas más. Son todos autos y camionetas que formaron parte de la flota de la Comuna pero que actualmente son chatarra, indicaron. Según parece, el intendente Fabián Ríos quiere hacer una limpieza de todos los elementos contaminantes que desde hace años son guardados dentro de los cuatro galpones y además sacar algún rédito económico de ello. Si bien se desconoce a ciencia cierta cuántas toneladas de chatarra serán las que se produzcan tras la compactación de más de 600 rodados, se espera que la venta de la misma deje dividendos importantes que por un lado salden el costo de alojamiento dentro de los galpones por varios años y también deje algún dinero extra para las arcas municipales.1
Viernes, 17 de julio de 2015