Los resultados del trabajo demuestran el gran potencial de la provincia para producir, pero -lo más importante - generan conocimientos que pasan a formar parte de nuestro patrimonio provincial.
El 14 del corriente habrá una primera capacitación para el manejo de los mapas y destinada a técnicos del Ministerio de Producción y del INTA.
En un importante trabajo ordenado por el Ministerio de Producción tendiente a ampliar la oferta productiva en toda la productiva, se presentó el primer informe parcial del Relevamiento de Suelos y Aptitud de Tierras en los Departamentos de Monte Caseros y Empedrado. El estudio es ejecutado por el Grupo de Recursos Naturales de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) del INTA Corrientes y financiado por el Consejo Federal de Inversiones (CFI).
Este avance parcial fue presentado formalmente para su revisión al Ministerio de Producción, y según se informó, el trabajo final estaría listo para fines de este año, el cual mostrará en detalle y a menor escala, información necesaria que le permitirá a la Provincia y al productor de estas regiones, gestionar de una mejor manera la aptitud de sus suelos.
Cabe destacar además que la tarea que se realiza en Monte Caseros y Empedrado, es parte de una labor que ya lleva varios años, en los que se logró mejorar sustancialmente el conocimiento del suelo también en los Departamentos de Curuzú Cuatiá, Sauce, Esquina, Goya, Lavalle y en las regiones conocidas como Gran Paisaje de la Llanura arenosa y Gran Paisaje Planicie aluvial del Paraná y afluentes que abarca sectores de los Departamentos de Bella Vista, Saladas, San Roque, Mburucuyá, Concepción, San Miguel, General Paz y Berón de Astrada. En este último Departamento se procedió a la evaluación de tierras para el cultivo de caña de azúcar en las regiones conocidas como Gran Paisaje de la Llanura arenosa y Gran Paisaje Planicie aluvial del Paraná y afluentes.
El 14, capacitación en manejo y usos de la información de suelo
En los últimos años, a raíz de importantes estudios llevados adelante por el Gobierno de la Provincia de Corrientes, con la participación del Grupo de Recursos Naturales de INTA, y financiado por el Consejo Federal de Inversiones, se ha generado y actualizado valiosísima información de aptitud de uso de suelo, como así también material cartográfico con mayor detalle y en formato digital.
En ese contexto y con el objetivo de difundir el resultado de estos trabajos y capacitar en el uso del material técnico disponible en toda la provincia y a todos los interesados, el Ministerio de Producción y el INTA organizan cursos de difusión y capacitación en manejo y usos de la información de suelos.
El primer curso estará destinado a técnicos del Ministerio de Producción e INTA, que actuarán como canal de transferencia a técnicos y productores en todo el territorio provincial. Además se tiene programado repetirlos en la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNNE y puntos estratégicos en el interior provincial.
La actividad destinada a funcionarios del Ministerio de Producción e INTA se realizará el próximo 14 de mayo, oportunidad en la que se capacitarán en conceptos básicos de categorización, uso potencial y aptitud específica de los suelos, fertilidad y fertilización y uso de cartografía en formato digital.
La importancia de la utilización de los mapas de suelos
Actualmente y frente a la necesidad creciente por producir más alimentos, energía y materias primas, el Gobierno Provincial, a través del Ministerio de la Producción y el Consejo Federal de Inversiones (CFI), mediante un convenio de Cooperación técnica con el INTA, específicamente con el Grupo de Recursos Naturales de la Estación Corrientes, trabajan en forma conjunta en la cartografía de suelos de la Provincia de Corrientes. Si bien es sumamente importante contar con un inventario de suelos, son pocas las provincias argentinas que poseen relevamientos sistemáticos y cartografía de suelos actualizados.
Conocer la distribución geográfica de los recursos naturales, poder cuantificarlos e interpretar su potencial, es uno de los requisitos básicos de la planificación, orientada al desarrollo territorial. El suelo se encuadra como uno de los recursos naturales más importantes y por medio de extensos trabajos de campo y minuciosos análisis de laboratorio, se determinan las principales cualidades de para reconocerlos, clasificarlos y darles una denominación, un nombre.
-Mapas básicos: le dan un nombre a los suelos, además proporcionan la información que los caracteriza química y físicamente. Los mapas básicos de suelos se generan dependiendo del uso y de los objetivos para los cuales se los ha confeccionado. Hay distintos tipos de mapas y se clasifican de acuerdo a la intensidad de muestreo en el terreno y de acuerdo a la escala en la cual son representados. Se los puede diferenciar en tres tipos básicos:
-Reconocimiento extensivo: Los mapas con escala de representación de 1:250.000 a 1:1.000.000 proveen información de extensas áreas a un nivel general, apropiado para la planificación regional del uso de la tierra. Son frecuentemente usados en análisis de tipo comparativo entre grandes regiones y con el fin de seleccionar áreas para estudios más detallados.
-Intensivos o Detallados: Con escala de representación mayor o igual a 1:20.000, son muy utilizados cuando lo usos de los suelos requieren una información muy detallada, por ejemplo en los cinturones urbanos y periurbanos, en las cercanías de ciudades, etc. (horticultura, floricultura, etc.). Son aplicados también en ordenamientos de pequeñas cuencas y para la localización de parques industriales, etc. Requieren de exhaustivos muestreos en el terreno y análisis de laboratorio.
-Semidetallados: Con escala de representación entre 1:30.000 a 1:100.000, este tipo de cartografía se elabora para usos de la tierra que no necesitan un conocimiento muy preciso ni tan detallado como el anterior, y se utilizan básicamente para la planificación agrícola, ganadera y forestal. En el proceso de mapeo, los suelos son identificados de manera detallada en áreas piloto (áreas de muestreo intensivo) y luego mediante interpretación, con fotos aéreas o imágenes satelitales y mediante verificaciones en el terreno, se extrapola la información hacia fuera de las áreas piloto. Requiere detallados muestreos en el terreno y análisis de laboratorio.
Dependiendo de la escala sobre la que se elabora y se representan los mapas, se logra tener una idea más o menos precisa y exacta de la distribución geográfica de los suelos en una región determinada y no solo de sus potencialidades productivas, sino también de sus limitantes productivas. Los mapas básicos usualmente se “traducen” en mapas temáticos para facilitar su interpretación y masificar su uso.
Hasta no hace mucho tiempo, los mapas de suelos eran estáticos, fijos, representados en forma de polígonos sobre el papel, cartulina o material semejante. La actualización cartográfica era relativamente modesta y lenta debido a la dificultad en actualizarlos y volver a imprimirlos. Pero con la masificación de la tecnología, con las imágenes satelitales y los sistemas de información geográfica, la cartografía se tornó mucho más dinámica.
Lunes, 11 de mayo de 2015