Datos preliminares indican que el o los asaltantes habrían ingresado por el patio de una escuela para llegar a la casa del profesional.
Un abogado habría sido despojado de unos 80.000 pesos y de alrededor de 7.000 dólares que tenía guardados en una caja fuerte en su domicilio de la ciudad de Goya. La policía impuso hermetismo para no entorpecer la investigación.
El o los delincuentes habrían trepado el muro de la escuela “Isabel King”, por la calle San Martín para después avanzar hasta el patio de la vivienda del profesional, ubicada por José Gómez al 500. Para entrar a la casa del abogado, rompieron el vidrio de una ventana consignó el portal TNGoya.com. Ya en el interior de la finca comenzaron a revisar muebles de distintas dependencias y forzaron una caja fuerte donde, según trascendió, había unos 80.000 pesos y unos 7.000 dólares además de documentaciones varias.
Personal de la comisaría 1ª está abocada a la investigación con la colaboración de otras unidades.
Robo en el barrio Pujol
Una señora, jubilada, concurrió a la casa de unos familiares para recibir la Navidad. En ese lapso en que la vivienda se hallaba sin ocupantes, ingresaron malvivientes y se apoderaron de varios artículos de valor.
El delito se cometió en una finca ubicada por la calle Zacarías Sánchez casi esquina con la avenida Armenia, en el barrio Pujol de la ciudad de Corrientes. Se presume que el robo se cometió entre las últimas horas de la noche del 24 y las primeras del 25 en momentos en que la gente estaba en pleno festejo de la Navidad.
Los asaltantes se dedicaron a registrar palmo a palmo todas las habitaciones, arrojando al piso lo que contenían los cajones de los muebles. Además, destrozaron algunos elementos.
Para ingresar al interior de la propiedad forzaron una abertura con una barreta.
Al parecer solo buscaban dinero en efectivo dejando electrodomésticos y otros artículos de valor.
Al arribar la propietaria y apenas abrió la puerta quedó paralizada frente al desastre que había en toda la casa. Instantes después, en medio de la angustia y los nervios avisó a la policía y a sus familiares. Resultó curioso que, en medio de los festejos, vecinos aledaños no advirtieron el ingreso o salida de extraños de la vivienda.
“Me llevaron un poco de ahorros. Pero lamento el daño que causaron”, murmuró la damnificada.
Viernes, 27 de diciembre de 2013