El epicentro de la construcción del gasoducto comenzó a la vera de la Autovía 117, avanzando rápidamente hasta la avenida Jorge Newbery, donde actualmente ingeniero, capataz, operarios y maquinarias trabajan intensamente.
La obra cuenta con un tendido de 3.500 metros de caños de acero con costura de 4 pulgadas, con revestimiento tricapa, unidos a través de una junta y sellados con una manta termocontraíble, tarea de la que se ocupan los fusionistas (técnicos especializados en soldaduras con electrofusión).
Finalizada esta etapa de sellado de juntas de cañerías, se pasa a la fase de radiografías (control de seguridad) a fin de verificar posibles pérdidas, superada la misma se procede a ubicar la conexión a una profundidad de 1,50 metros entre dos mallas de seguridad separadas por 30 centímetros de tierra entre las mismas. Se construyó una estación primaria de reducción de presión baja y alta -para bajar el peso del gas-, recorrió dos kilómetros (llamado técnicamente como ramal) hasta lo que será una planta de GNC (estación secundaria), gas licuado y comprimido utilizado para vehículos, que estará ubicada sobre avenida Arturo Freyche, frente al barrio Caá Guazú.
Martes, 10 de diciembre de 2013