El edificio de 500 metros cuadrados, de tan sólo dos años y premiado en 2011 como una de las tres mejores obras arquitectónicas del país, "se vino abajo como un castillo de naipes", según testigos. Aún buscan cuerpos bajo los escombros. El desplome de un techo en un centro comercial de la capital de Letonia, Riga, causó la muerte de 43 personas, mientras que se presume que aún quedan otras sepultadas bajo los escombros. Tres de las víctimas son rescatistas. los heridos se encuentran otras 30 personas que fueron sacadas del lugar, según un mensaje en la red social Twitter de la agencia de rescate.



Familiares desesperados contaron a la televisión letona que intentaban en vano comunicarse a los teléfonos móviles de los desaparecidos. Testigos relataron que aparentemente el colapso se produjo en dos etapas.

El techo del centro comercial cayó inicialmente sobre una superficie de unos 500 metros cuadrados. Luego el edificio se vino abajo "como un castillo de naipes", señaló el vicealcalde Andris Ameriks.

Una de las causas que se presume influyeron para que el techo se desplome son los trabajos de construcción que se estaban realizando en el edificio, de sólo dos años de antigüedad.

Pero también es posible que haya explotado una caldera de calefacción. El edificio había sido distinguido en 2011 como una de las tres mejores obras arquitectónicas de Letonia, según la agencia de noticias Leta.

El ministro del Interior Rihards Kozlovskis dijo por teléfono a la televisión letona: "Está claro que ha habido un problema con el cumplimiento de los requisitos de construcción".

Unas 25 personas esperaban cerca del lugar en busca de información de sus familiares. La cifra de personas atrapadas se desconoce de momento.

"Tengo ahí a mi esposa. No hay información sobre ella, si está viva o muerta. Cada vez que llamo, no hay información", le explicó Igor Umanov a Reuters Television. Después de 15 horas de labores de rescate, dijo que creía que su mujer estaba viva.

Viernes, 22 de noviembre de 2013