En la madrugada del martes, una familia del barrio Molina Punta fue víctima de los denominados quemacoches, una tendencia que se impone en Buenos Aires y que -lamentablemente- comenzó a implementarse en Corrientes.



Ocurrió en las 250 viviendas del barrio Molina Punta, lugar donde dejó estacionada su camioneta Mitsubishi modelo '99 la escribana Karina Zárate Vedoya.

"A las 2 de la madrugada nos alertaron los vecinos que se estaba quemando nuestra camioneta. Estábamos durmiendo con mi familia y cuando salimos vimos una bola de fuego gigante", expresó la mujer en diálogo con www.ellitoral.com.ar

"Empezamos a tirarle arena, agua con los vecinos, intentando apagar el fuego, pero ya no pudimos hacer nada", contó acongojada la damnificada. Una hora más tarde, llegó la autobomba de Bomberos Voluntarios del barrio 17 de Agosto, agregó.

Zárate adjudicó este ataque vandálico a los denominados "quemacoches", ya que "no tenemos bronca con nadie, nos llevamos bien con los vecinos, somos gente laburante. Este es un barrio tranquilo y mantenemos mucha cordialidad entre todos", expresó.

"Siento tanta impotencia por lo que ocurrió", reiteró la mujer, quien aún recuerda el llanto desesperado de su hijo de 5 años al ver cómo se incendiaba el vehículo. "En ese momento traté de tranquilizarlo, pero no podía, se largó a llorar de una manera terrible", dijo.

La escribana contó que la denuncia fue radicada en la Comisaría 9º, "y ahora estoy luchando con el seguro para que me reconozcan algo".

Pericias
De acuerdo a las pericias de los bomberos, Karina contó que "el incendio fue intencional, rociaron con nafta toda la camioneta. Incluso hallaron en la rueda derecha trasera una botella de plástico de gaseosa con nafta que dejaron los delincuentes".

Consultada por la web de El Litoral si observó movimientos extraños en la zona horas antes, la mujer dijo que "dos vecinos me comentaron que esa noche había gente extraña por el barrio, que fueron a una librería para averiguar si vendían bebidas alcohólicas; pero no tenemos ningún sospechoso".

La profesional también contó que "hace poco con mi esposo terminamos de construir la entrada para el garage, pero como nunca nos pasó nada, la dejamos estacionada a la camioneta afuera, como siempre. Afortunadamente no nos pasó nada a nosotros", expresó esta mamá de un nene de 5 años y una beba de 2.

"No entiendo por qué hicieron ésto", se cuestionó una y otra vez Karina, en busca de una explicación a este hecho vandálico de la que fue víctima. "No sé cómo salir de esta situación; uno ve el sacrificio, la plata que tanto nos costó juntar con mi esposo para poder comprarla y ahora ver cómo quedó la camioneta y no poder hacer nada da mucha bronca...mucha impotencia", dijo entre sollozos.

Cabe recordar que la semana pasada, frente al Ministerio de la Producción por Roca al 1100, un Renault 9 también fue afectado por los llamados "quemacoches".

EL LITORAL

Miércoles, 24 de abril de 2013