Nelson Valenzuela se presentó ayer ante la Justicia para brindar su testimonio en la causa, pero su estado de salud hizo que la audiencia vuelva a postergarse. El joven se constituyó como querellante y dijo que tiene datos “claves”.




La audiencia reprogramada en la que debía declarar ayer el sobreviviente de la tragedia de la calle San Martín 652, Nelson Valenzuela, fue postergada nuevamente debido al estado de salud del joven. Valenzuela se presentó a la cita judicial, dispuesto a dar su testimonio, pero luego sintió mareos y malestar general, por lo que la jueza Graciela Ferreyra determinó que volverá a convocarlo cuando reciba el alta médica definitiva. Desde ayer, el sobreviviente se constituyó también en querellante en la causa.
La primera fecha de audiencia fue el pasado 27 de noviembre, cuando el joven presentó un certificado médico donde se acreditaba una fuerte recaída y se le indicaba un reposo de 72 horas, por cuanto el propio testigo solicitó que se fije una nueva fecha.
Tras ser sometido hace dos semanas a una cirugía estética, Valenzuela debía presentarse ayer, a las 8, ante el Juzgado de Instrucción Nº 6 a cargo de la jueza Graciela Ferreyra. El testigo llegó media hora tarde a las oficinas de la calle Pellegrini y los funcionarios judiciales advirtieron en él signos de malestar y debilidad.
Luego de varias horas de evaluación sobre la conveniencia de exponerlo a prestar declaración testimonial sobre los hechos que dieron lugar al trágico suceso en el que perdieron la vida sus amigos y compañeros de trabajo, durante más de seis horas, se resolvió suspender la audiencia y convocarlo cuando reciba el alta médica definitiva, confirmó Valenzuela a La República.
Además, el sobreviviente se constituyó como querellante, bajo la asesoría legal de Nelson Pessoa. La presentación original fue promovida por la familia de Diego Rodríguez, obrero fallecido.
“Nelson Valenzuela sabe lo que ocurrió antes, durante y después de la tragedia”, indicó el abogado de la familia Rodríguez, Ernesto González. “Su testimonio es clave. Hace tiempo pedimos que declare, pero a veces él tiene recaídas y por eso no puede presentarse en la fecha que determina la Justicia”, explicó el querellante.
Según los abogados de la familia Rodríguez, la demora nos complica el avance de la causa, aunque entienden que el joven todavía necesita recuperarse íntegramente para afrontar la declaración judicial.
“Es evidente que las secuelas les genera este tipo de situaciones y no hay garantías que asista cuando el juzgado lo espera”, remarcó González, mientras que los familiares presentes en el Juzgado Nº 6 expresaron que la declaración de Valenzuela marcará “un antes y un después”.

Recuperación
“Sentí mareos y un fuerte dolor en el estómago, yo quería declarar, pero la jueza consideró que serían seis horas agotadoras para mi recuperación”, contó el testigo a este diario.
Tras el episodio en el juzgado, donde Valenzuela estuvo acompañado por su familia y los familiares de los otros obreros fallecidos, el joven viajó a Resistencia para ser atendido por los médicos que siguen su caso.
El 22 de marzo fue atendido en emergencias del hospital Escuela, y en uno de los primeros partes médicos se informó sobre un daño pulmonar grave, causado por aplastamiento.
Semanas después, el obrero fue sometido a una cirugía reparadora de columna en un sanatorio chaqueño y tuvo un largo proceso de rehabilitación, aunque las secuelas persisten y aún no puede recuperarse por completo.


Martes, 11 de diciembre de 2012