El gobernador Ricardo Colombi presentó este jueves el Plan Alimentario Corrientes (PAC), uno de los más avanzados del país, que tiene como objetivo erradicar definitivamente la desnutrición infantil, garantizando la alimentación de niños y adolescentes. El mandatario destacó que el Programa también sirve para “dar paz, tranquilidad, mesura y recuperar el concepto de la familia”.
Ricardo Colombi encabezó el acto de presentación del PAC, ante un colmado auditorio en el Salón G de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional del Nordeste –ubicado en Sargento Cabral 2001 en capital-. Acompañaron al mandatario: el vicegobernador, Pedro Braillard Poccard, el ministro secretario general de la Gobernación, Carlos Vignolo, los ministros Orlando Macció (Educación) y Julián Dindart (Salud Pública), Abel Albino, especialista en nutrición infantil y presidente de la Fundación CONIN, secretarios y subsecretarios del ejecutivo provincial, interventores de entes autárquicos, legisladores provinciales, el decano de la Facultad de Medicina, Samuel Bluvstein, representantes de las empresas Teknofood y Shonko, directores de hospitales, referentes de entidades intermedias, invitados especiales y público en general.
Mucho más que alimentos
Ricardo Colombi fue quién tomó la palabra en primer lugar y dio la bienvenida al doctor Abel Albino, resaltando su trabajo por la nutrición infantil desde la fundación CONIN. Sobre la misma dijo que “es una institución que se preocupa por la niñez y es importante que podamos escuchar sus conceptos a través de su propio fundador y tomar aspectos de esta exposición para ver cómo podemos profundizar y modificar lo que haga falta”.
En este sentido, sostuvo que “nunca se sabe todo, todos los días es un constante aprendizaje y la capacitación es muy importante para que los programas alimentarios que ejecutamos puedan tener el resultado que merecen, por el bien del millón de correntinos”.
Agregó que “este encuentro es de suma importancia teniendo en cuenta las acciones de gobierno que venimos llevando a cabo para lograr una política alimentaria que tienda a mejorar la calidad de vida de nuestros niños, jóvenes y adultos”.
Luego relató que “cuando resolvimos realizar estas acciones lo hicimos convencidos de que es una inversión que va a dar resultados en el tiempo”. Y entendió que “esto tiene que ver con la cuestión social, familiar y más allá de las dificultades, ponemos nuestros mayores esfuerzos para que estos programas puedan tener el éxito que buscamos”.
Seguidamente resaltó que “lo importante es que no bajamos los brazos y día a día agudizamos el ingenio para establecer nuevos programas, los cuales son muchos y todos los actores juegan un rol muy importante para que estas políticas lleguen casa por casa, porque solo así van a funcionar”.
Asimismo destacó que Corrientes “es una de las pocas, sino la única, provincia que universalizó la copa de leche en las escuelas, llegando con este alimento a más de 250 mil niños y jóvenes”. También mencionó el programa Mil Días que “abarca a la madre embarazada y el niño”.
En tanto, advirtió que “la cuestiones económicas y la situación inflacionaria del país condicionan muchos recursos, pero a pesar de eso, nuestra decisión política está firme y asegurada con nuestras acciones de gobierno que tienden a transmitir un clima de seguridad, tranquilidad y de responsabilidad, porque los argentinos no nos merecemos vivir en un constante clima de confrontación, discusiones y agresiones”.
En este sentido, consideró que “estos programas también sirven para dar paz, tranquilidad, mesura, para recuperar el concepto de la familia, el rol del padre y de la madre, la responsabilidad que se debe tener en el hogar, en la calle y en la escuela”. “Entonces estos programas del Plan Alimentario Corrientes no son simplemente alimentos, va a mucho más allá, es un plan integral”, concluyó.
Detalles del Plan
La puesta en marcha del Plan demanda una inversión que supera los $ 400 millones al año, los cuáles se distribuyen a través del Ministerio de Educación $ 310.405.000, en asistencia directa $ 78.178.733, a través del Ministerio de Salud $ 38.700.000 y a través de instituciones: $ 2.384.000.
Los grupos prioritarios fueron definidos en embarazadas, madres durante la lactancia, niños de 0 a 36 meses, niños con necesidades especiales, niños y adolescentes que asisten al sistema educativo y familias que necesitan ayuda para mejorar su alimentación.
Cabe señalar que los programas respectivos del PAC están canalizados a través de las escuelas, los centros de salud y la estructura de acción social. Algunos son de alcance masivo, como el programa de desayunos y meriendas escolares, que beneficia a 250.000 alumnos.
En ese contexto fue diseñado un programa para cada necesidad, con este detalle:
Programas de asistencia a través del sistema de salud: Programa 1.000 Días y Programa de Nutrición Materno Infantil.
Programas de asistencia escolar: Programa Alimentario Escolar.
Programas de asistencia a través de instituciones: Centros de Promoción del Menor, Hogares de Niños y Adolescentes y Centros de Desarrollo Infantil.
Programa de asistencia directa a personas y familias: Programa para Personas Celíacas, Cajas de Alimentos, Tarjeta y Vales Sapucay, Programas de Seguridad Alimentaria.
Ministro Macció
También se dirigió a los presentes el titular de la cartera educativa, Orlando Macció, que en el comienzo remarcó que el Plan significa lisa y llanamente que “Estamos Alimentando el Futuro”.
Macció puso de relieve que el mismo surge de acuerdo a los lineamientos fijados por la gestión del gobernador Ricardo Colombi, en “asegurar que todos los niños correntinos reciban una alimentación que les permita crecer saludablemente, desde el momento de su gestación hasta su mayoría de edad”.
El ministro enfatizó que todas las fuerzas están puestas en “erradicar definitivamente la desnutrición infantil en Corrientes”, para lo cual, precisó se “instrumenta este Programa, uno de los más avanzados y completos del país”.
“Nos propusimos garantizar el futuro de los chicos, que es asegurar el principio de igualdad de oportunidades para todos”, acotó y sostuvo que desde el punto de vista social invertir en garantizar la alimentación de todos quienes lo necesitan es “una misión moralmente ineludible y además, económicamente conveniente, ya que disminuye el riesgo de enfermedades y garantiza ciudadanos con plena capacidad de estudiar, trabajar y progresar”.
“En Corrientes trabajamos promoviendo el desarrollo para que cada día más ciudadanos accedan a una mejor calidad de vida. Es por ello que lanzamos el PAC, que es un conjunto de iniciativas para garantizar un abordaje integral de la problemática”, concluyó Macció.
Ministro Dindart
En tanto, el ministro de Salud Pública, Julián Dindart, resaltó el PEP 2021, que por mandato constitucional “genera y obliga los municipios y al gobierno provincial a generar políticas públicas, como esta que hoy desplegamos”.
Aseveró que el Programa 1000 días va a “actuar directamente en la educación de la madre para que sepa llevar y contener su embarazo, una madre que va a ser educada a través del sistema sanitario y por los agentes sanitarios”
“Va a ser el Programa que da lo que nosotros decimos como pediatras cobertura a las madres, va a potenciar la lactancia materna con todos los beneficios. Nosotros tenemos alrededor de 17 mil chicos dentro del programa. Es un programa en una Provincia con un Gobierno pluralista con diferentes ideas, en el que estamos todos comprometidos”, subrayó Dindart.
El funcionario declaró que el Gobernador Ricardo Colombi es el responsable “que nosotros tengamos un programa como este, que va a trabajar sobre la madre y sobre el niño y principalmente sobre todas las cosas va a permitir que no tengamos una nuez seca en la cabeza de los niños correntinos en los próximos años, sino que tengamos una nuez plena, un cerebro desarrollado y estemos dando a todos los niños de corrientes una mejor nutrición, una mejor calidad de vida.”.
Abel Albino ponderó las políticas
de estado del gobierno provincial
El doctor Abel Albino es toda una eminencia en pediatría en la República Argentina. En el año 1972 se graduó con el título de médico en la Universidad de Tucumán. Al año siguiente viajó a la República de Chile, para especializarse en pediatría en el Hospital Luis Calvo Mackena; ahí tuvo el honor de conocer al Prof. Dr. Fernando Mönckeberg, donde se contactó por primera vez con la problemática de la desnutrición infantil.
En el año 1987 se doctoró en medicina en la Universidad Nacional de Cuyo.
Después de un tiempo, en el año 1992, se trasladó a España para estudiar Biología Molecular en la Universidad de Navarra. Le produjo profunda tristeza ver la brecha entre Europa y la Argentina; países tan pequeños y poderosos, frente al nuestro que, siendo infinitamente más rico, se encuentra tan empobrecido.
Una tarde, encontró un diario tirado, el cual contenía una entrevista a la Madre Teresa de Calcuta, en la que le preguntaban qué era para ella la paz. La reflexión le encantó. Supo que tenía que servir, lo que le faltaba saber era a quién y cómo. Al día siguiente decidió abandonar España, pues se dio cuenta que estaba haciendo una especialidad del futuro, cuando en realidad es hijo de un país que no tiene solucionado su pasado.
En mayo de 1992 regresó a Europa con grandes posibilidades de que lo contratasen. En esa oportunidad escuchó al Papa Juan Pablo Segundo, que pedía servir a los más pobres.
De regreso a Mendoza organizó un congreso, en el que invitó al Prof. Dr. Fernando Mönckeberg, quien disertó sobre la única debilidad mental que se puede prevenir y revertir, la única creada por el hombre, la debilidad mental del desnutrido.
Así, junto a un gran número de colaboradores, el 4 de septiembre del 1993 creó en Mendoza Argentina la Fundación CONIN (Cooperadora de la Nutrición Infantil).
Su disertación en la Facultad de Medicina de la UNNE fue seguida atentamente, con anécdotas, conceptos jugosos, reflexiones y fotografías que mostraron con crudeza el flagelo de la desnutrición infantil.
En su introducción, Albino, ponderó que la provincia de Corrientes tenga políticas de estado fuerte para atacar la desnutrición infantil. Y elogió que las acciones estén encuadradas dentro del Plan Estratégico Participativo (PEP 2021), lo que significa que seguirán adelante más allá del gobierno de turno.
En sintonía con el gobernador Ricardo Colombi, el facultativo dejó en claro que “como argentinos debemos dejar de lado las mezquindades, las confrontaciones y ponernos a trabajar entre todos por la salud de la población”.
Y reflexionó: “Tenemos que terminar con la eterna guerra del hombre contra el hombre, e iniciar todos juntos la única guerra que vale la pena, la única en que todos ganan, la guerra del hombre contra el hambre”.
Como parte de su visión, Albino aspira a un “país con igualdad de oportunidades, donde todos puedan desplegar su potencial genético, donde todos sus miembros pueden optar con libertad el camino a seguir, no limitados por incapacidades intelectuales provocadas por la misma comunidad” y afirmó que la “desnutrición infantil genera debilidad mental, la única que se puede prevenir, la única que se puede revertir, la única causada por el hombre”.
Luego explicó que la formación del sistema nervioso central está determinada en los primeros 2 años de vida. “Si durante este lapso el niño no recibe la alimentación y estimulación necesarias, se detendrá el crecimiento cerebral y el mismo no se desarrollará normalmente, afectando su coeficiente intelectual y capacidad de aprendizaje; corriendo el riesgo de convertirse en un débil mental”, explicitó.
Y fue contundente al remarcar que “este daño afecta a toda la sociedad ya que la principal riqueza de un país reside en su capital humano, y si éste está dañado, ese país no tiene futuro”.
Viernes, 9 de noviembre de 2012